El lotero de A Coruña que se quedó con un boleto premiado con 4,7 millones, a juicio por estafa
El acusado y su hermano, un excargo de Loterías procesado por blanqueo y encubrimiento, deberán depositar una fianza equivalente al valor del premio
El Juzgado de Instrucción número 8 de A Coruña ha decretado la apertura de juicio oral contra Manuel Eugenio Reija, el lotero que hace 11 años se quedó con un boleto de la Primitiva que había resultado premiado con 4,7 millones de euros. El juez sienta en el banquillo a Reija junto a su hermano Miguel, que era el delegado provincial de Lotería y Apuestas del Estado cuando ocurrieron los hechos. El lotero, que regentaba la administración de la céntrica plaza coruñesa de San Agustín, está acusado de un delito de estafa y, alternativamente, de apropiación indebida y la Fiscalía pide para él seis años de cárcel. Es la misma pena que el ministerio público reclama para el excargo del organismo público, contra el que pesa un delito de blanqueo de capitales y, alternativamente, de encubrimiento. Ambos deberán depositar una abultada fianza de 4,7 millones, equivalente al premio que hubiera cobrado el verdadero autor de la combinación ganadora y que falleció dos años después de su acierto sin saber que había resultado agraciado.
El sorteo que desencadenó el caso se celebró el 30 de junio de 2012. La combinación ganadora fue 10-17-24-37-40-43. La había sellado de forma automática un hombre de A Coruña que acudió a la administración de Miguel Reija para comprobar esa apuesta y otras que también había hecho. Según la Fiscalía, el lotero acusado ocultó el jugoso premio al dueño del boleto, pese a que al meterlo en la máquina le saltó un mensaje de alerta. “Conocedor del alto importe del premio, se lo quedó para sí, junto con los demás boletos”, sostiene el ministerio público. La fiscal del caso mantiene que horas más tarde acudió a la delegación provincial de Loterías que dirigía su hermano, quien le facilitó los trámites para cobrar el premio “prescindiendo de cualquier procedimiento reglado y como si fuese legítimo poseedor”.
Ese cobro exprés, sin embargo, no se culminó. El lotero alegaba que había encontrado el boleto premiado tirado en su administración y que no era posible localizar a su dueño. Pero la Sociedad Estatal de Apuestas y Loterías del Estado obligó a tramitar un “expediente de hallazgo” en 2013, es decir, un llamamiento público para intentar encontrar a su propietario. Se presentaron más de 300 aspirantes a millonarios a lo largo de la investigación. Finalmente fue la policía la que identificó al agraciado, pero desgraciadamente ya había fallecido. Hoy en día, el resguardo de la combinación ganadora está depositado en la SELAE a la espera del desenlace del juicio.
A lo largo de la instrucción fueron imputados otros cuatro cargos de Loterías del Estado, pero acabaron siendo exculpados. En el auto de apertura de juicio divulgado este martes por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, que es firme, el juez ha ratificado la situación de libertad provisional de los dos acusados y ha advertido de que si no depositan la fianza conjunta de 4,7 millones, “se les embargarán bienes en cantidad suficiente para asegurar la suma señalada”. La fiscal ha reclamado que, en caso de que la justicia se dictamine que el lotero se quedó con un boleto ajeno, el premio sea cobrado por las herederas de su legítimo propietario, es decir, su viuda y su hija. Si en el juicio se concluye que el hermano del lotero cometió blanqueo, el ministerio público pide también para él una multa de 9,4 millones, el doble de lo que hubiera cobrado el fallecido aquel mes de junio de 2012.
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