El carril bici y la movilidad centran el debate en Elche

La movilidad se ha convertido en el eje central de la campaña electoral en Elche. Un asunto que ha enfrentado durante los últimos cuatro años a gobierno y oposición y que ahora, durante estas semanas de promesas electorales, los partidos están haciendo uso de esta materia de manera diferente ante su electorado.

El gobierno municipal de PSOE y Compromís aprobó ‘in extremis’, en la última sesión plenaria de la legislatura celebrada el pasado dos de mayo, el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) como una hoja de ruta a desarrollar durante la próxima década con el objetivo de favorecer una transformación urbana en el municipio que haga frente a la emergencia climática a través de acciones que impulsan otro tipo de movilidad más limpia frente al vehículo privado que representa el 80% de las emisiones contaminantes en el municipio. Aun así, aunque la aprobación de este plan no se ha llevado a cabo hasta semanas antes de las elecciones, PSOE y Compromís ya han ido implementando algunas de las actuaciones recogidas en el plan como la construcción de más de 10 kilómetros de carriles bici o plataformas únicas, la modernización del autobús urbano por modelos híbridos o eléctricos, así como el traslado de aparcamiento a los exteriores de los barrios con la intención de llegar a 2030 con una reducción de hasta el 50% de las emisiones contaminantes.

El Plan de Movilidad recoge inversiones en infraestructuras, conciencienciación y sensibilización por valor de 40 millones de euros a poner en marcha durante la próxima legislatura. Sin embargo, el documento ha suscitado las críticas y el rechazo de la oposición por la falta de una estrategia para las pedanías que el gobierno deja en manos del PMOME (Plan de Movilidad Provincial de la Conselleria), por el incremento de los precios de la zona azul para favorecer la rotación de vehículos o por la supresión de 1.900 plazas de aparcamiento. Todo en un contexto en el que lejos de reducirse el parque móvil, en el último año se ha incrementado en 1.792 vehículos hasta rozar los 160.000 censados. Para hacer frente a estas cifras, las concejalías de Movilidad Sostenible y Comercio (dirigidas por Compromís) impulsaron el pasado verano la disposición de bonos consumo para la compra de patinetes y bicicletas entre la ciudadanía con una inversión de 550.000 euros que se agotaron en unas horas.

La concejala de Movilidad, ahora candidata de Compromís a la alcaldía de Elche, Esther Díez, ha librado una batalla durante estos cuatro años para defender este plan que, incluso en estos últimos meses, ha tenido reticencias en su aplicación hasta de sus socios de gobierno del Partido Socialista. En esa última sesión plenaria donde el ejecutivo local aprobó en solitario esta planificación, el portavoz socialista, Héctor Díez, defendió esta hoja de ruta aunque alertó de que podría no aplicarse en su totalidad, algo que le reprocharon desde Compromís que exigirán su aplicación completa en un posible nuevo pacto de gobierno. También marcó distancia el candidato socialista, Carlos González, en una entrevista en Elche 7 Tv donde aseguraba que el municipio tiene que avanzar para reducir las emisiones contaminantes “sin sacrificios inasumibles”. Además, añadía que “hay que persuadir sobre el transporte alternativo, sin satanizar ni perseguir al conductor del vehículo privado”. En esta misma línea, el Partido Popular ha considerado en estos últimos años, que el gobierno municipal ha desarrollado una política de asedio hacia el coche personal. El candidato popular a la alcaldía, Pablo Ruz, consciente de que su principal rival es el Partido Socialista, está intentando trasladar a la ciudadanía que este plan es cosa únicamente de los socialistas aunque la concejalía ha estado dirigida por Compromís. De hecho, en estos días de campaña, los populares han recorrido los barrios repartiendo octavillas en las que se recoge la retirada de aparcamiento contemplada en el PMUS, de lo que culpan directamente al PSOE de Elche.

Y es que, con la construcción de carriles bici y plataformas únicas en el municipio, se han suprimido decenas de plazas de aparcamiento gratuito. Pero, en los últimos cuatro meses, ante las críticas de la ciudadanía, PSOE y Compromís han desarrollado un plan para ampliar los espacios para el estacionamiento con grandes explanadas que se han acondicionado para este fin. En total, se persigue crear más de 3.000 nuevas plazas de aparcamiento en el perímetro de los barrios para compensar las que se han retirado hasta el momento y las cerca de 2.000 que aparecen en el plan que se suprimirán en su aplicación. En este sentido, PSOE y Compromís insisten en que no se eliminan plazas de aparcamiento sino que se “desplazan”. Suponen tan solo el 4% de la oferta total que hay en el municipio. Aun así, el Partido Popular ya ha anunciado que no va a aplicar este plan y que, además, desmantelará algunos de los carriles bici que se han construido estos años en el que caso de gobernar. Los populares, además, reprochan que este documento se ha hecho sin consenso ni los informes de la Policía Local, aunque desde el gobierno se recuerda que tiene la aprobación de la Conselleria de Medio Ambiente y Transporte, que se ha consensuado con los vecinos y vecinas, que ha pasado por un periodo de exposición pública y que los partidos podrían haber presentado su plan alternativo en la Mesa de Movilidad donde todos están representado algo que, asegura Compromís, no han hecho.

Lo que ha hecho el Partido Popular en estas últimas semanas es convocar un acto para mostrar a la ciudadanía un plan de “miniaparcamientos” subterráneos que quieren construir en el entorno del casco urbano, algunos próximos al Área de Vigilancia Arqueológica. Unos parkings que serían de pago, pero con unas “tarifas atractivas”. Una calificación que desde el PSOE no terminan de entender y que, a la vez, también han presentado otro plan de aparcamientos subterráneos con 3.750 plazas.

Pero en este plan también se recogen otras medidas que buscan pacificar la ciudad cediendo mayor espacio a los peatones. La candidata de Compromís, Esther Díez, ha anunciado que en los próximos años se van a crear espacios públicos equivalentes a 17 plazas de Baix (plaza del Ayuntamiento), es decir más de 32.000 metros cuadrados. Y es que, la Plaza de Baix se ha convertido en uno de las actuaciones de las que PSOE y Compromís han presumido en esta legislatura por la transformación que ha supuesto pese a la oposición rotunda del Partido Popular y de algunos comerciantes y vecinos que ahora reconocen su éxito. Es más, en estos cuatro años la peatonalización de este entorno ha favorecido la apertura de más de 30 nuevos locales. Además, el 60% de los comerciantes reconocen el impacto positivo de esta actuación que ahora quieren repetir en otros barrios del municipio.

En definitiva, Compromís quiere seguir avanzando en un cambio en la movilidad y el urbanismo para asegurar entornos más amables que es lo que les reclaman sus votantes y en cumplimiento de la Ley Valenciana para municipios de más de 20.000 habitantes de la Comunitat, como Elche. Por su parte, el PSOE defiende con menos efusividad esta hoja de ruta conscientes de que los cambios planteados en la movilidad podría no contentar a todo su electorado. Y, por su parte, la oposición con el Partido Popular al frente se coge a estas modificaciones haciendo un llamamiento a todos los ilicitanos e ilicitanas que ahora no pueden aparcar en la puerta de su casa para que les voten.

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