Unas Fallas con Mazón ausente y atrincherado en el Palau de la Generalitat

El presidente valenciano Carlos Mazón ha vivido las Fallas de este año atrincherado en el Palau de la Generalitat, sede del Gobierno valenciano, en plena instrucción judicial de la gestión de la dana del pasado 29 de octubre. Ni una sola vez ha pisado Mazón el balcón del Ayuntamiento de Valencia desde el que se dispara desde el 1 de marzo la mascletà, uno de los espectáculos pirotécnicos más ruidosos y característicos de la fiesta, que los políticos suelen explotar para ganar tirón popular.

Tampoco ha visitado la falla ganadora ni por ninguna otra. Al president solo se le ha visto ataviado con el blusón y el pañuelo fallero cuando a principios de la semana grande fallera recibió en las dependencias del gobierno autonómico, en un acto abierto solo a reporteros gráficos, a representantes del mundo de la fiesta, incluidos los que han ganado el primer premio de este año, dando por buena ese cita de “si Mahoma no va a la montaña…”. “Está centrado en la reconstrucción”, dijo la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, para justificar la ausencia tan notoria de Mazón de los actos públicos falleros.

La dana y todo lo que ha envuelto la tragedia en estos casi cinco meses ha sido retratado —en unos sitios con más crítica que en otros— en las coloristas fallas plantadas en las calles, las disputas entre partidos, el papel de los voluntarios o la devastación en la zona cero. También la figura del presidente valenciano, que lleva meses esquivando actos multitudinarios por temor a que lo increpen y le echen en cara que el día de la tragedia, que se ha saldado con 225 muertos y tres desaparecidos, no estuviera al frente del Cecopi o que este órgano lanzase un mensaje de alarma a la población cuando la gente se encontraba ya atrapada. Su comida en el restaurante El Ventorro ha sido recreada por la falla del Pilar, una de las más grandes de la capital, al representarlo vestido como el personaje Wally, sentado en una mesa, y con un cartel al lado donde podía leerse: “Enhorabuena, has encontrado a Mazón… en la falla. Pero todos hemos perdido el juego porque no pudimos encontrarlo cuando era una cuestión de vida o muerte”.

Su último intento de estar presente en la fiesta de forma virtual, a golpe de tuit, acabó en tropiezo. “Las fallas son el alma de nuestros barrios, inundan cada rincón de la ciudad con música y ambiente”, tuiteó Mazón en su cuenta de X el pasado día 17. La cascada de críticas al empleo precisamente del verbo inundar cuando el recuerdo de la dana sigue estando muy presente, se sucedieron y finalmente tuvo que sustituirlo por llenan.

El intempestivo anuncio, el pasado lunes, de un preacuerdo con Vox, su exsocio de Gobierno, para aprobar los presupuestos de 2025, bloqueados desde hacía meses, e incluso armar un pacto para lo que resta de legislatura, ha sido el único acto en el que se ha dejado ver esta semana. Fue una declaración institucional en las Cortes Valencianas sin preguntas en la que cedió e hizo suyas las grandes banderas del grupo de ultraderecha como son las críticas al Pacto Verde Europeo, a la inmigración ilegal o a la lengua valenciana. Unas cuentas que se presentarán este jueves y que incluirán una importante inyección económica para la reconstrucción. Un movimiento con el que Mazón gana tiempo y coge oxígeno después de semanas acogotado por la presión social en la calle y la sucesión de autos judiciales emanados del juzgado de Instrucción número 13 de Catarroja en torno a la gestión el día de la dana.

El auto que la jueza emitió el pasado 10 de marzo supuso un salto cualitativo en la instrucción del caso, tanto por la imputación de los responsables de Emergencias en la Generalitat Valenciana —la exconsellera Salomé Pradas y el ex secretario autonómico Emilio Argüeso— como por el relato que hace de la gestión de la Administración autonómica. El auto de Nuria Ruiz Tobarra es una enmienda a la totalidad a las tesis que hasta ahora ha esgrimido el Ejecutivo de Carlos Mazón para blindarse de las críticas a su actuación ante la mayor catástrofe que ha arrasado Valencia. La magistrada desmontó la gran mayoría de sus argumentos, desde la falta de información para alertar a la población hasta el reparto de las competencias en la emergencia.

La instrucción avanza y en plena semana fallera el juzgado ha citado a declarar el día 11 de abril a Pradas y a Argüeso. Este último presentó este martes un recurso al auto de la jueza del pasado viernes en el que la magistrada dejaba la puerta abierta a solicitar las llamadas de familiares de fallecidos, lesionados o testigos que den el consentimiento para ello durante la tarde de la riada. La defensa de Argüeso ha replicado que el 112 no envió “comunicación alguna” al Cecopi a pesar de que el director del Centro de Emergencias formaba parte de este órgano de coordinación y critica que siga actuando “en absoluta indefensión” y considera que las medidas de investigación acordadas en el citado auto del pasado día 14 “son totalmente impertinentes e inútiles”.

La letrada de Argüeso advierte de que las grabaciones de las llamadas recibidas en el 112 que podrían incorporarse a la causa corren el riesgo de acabar filtrándose y añade: “Dadas las características que todos podemos presuponer de estas llamadas (llamadas de personas totalmente angustiadas por las situaciones que estaban viviendo), van a generar auténtica alarma social, además del daño que puedan generar a las víctimas de la pasada dana”.