Compromís pide al Gobierno la caducidad de la concesión hotelera en el Sidi Saler y su derribo

Compromís ha pedido al Gobierno de España, en concreto al Ministerio para la Transición Ecológica que dirige Sara Aagesen, que declare la caducidad de la concesión para la explotación hotelera del antiguo Sidi Saler y proceda a su derribo, siguiendo la misma hoja de ruta que hizo con el hotel Algarrobico en Carboneras (Almería), en pleno parque natural del Cabo de Gata–Níjar, ha manifestado la diputada valencianista Àgueda Micó.

Micó ha formulado una batería de preguntas y ha solicitado una reunión para pedir que tome medidas al respecto. La diputada considera que “si el gobierno lo ha podido hacer con la compra de los terrenos del Algarrobico, también puede hacerlo con el Sidi Saler para garantizar la salud ambiental de la Albufera”.

La portavoz valencianista en el Ayuntamiento de Valencia, Papi Robles, ha recordado las dos sentencias judiciales que avalan la actuación del anterior gobierno local, liderado por Compromís, que caducó la licencia ambiental del Sidi Saler en 2022 y denegó una licencia de obra a los titulares de la concesión hotelera —los fondos Divarian y Coral Homes— para reabrirlo.

Robles ha denunciado también “maniobras” del gobierno de Catalá para impedir el derribo de este edificio. “Como sabe que la normativa vigente no permite la reapertura del Sidi Saler, Catalá está cocinando un cambio normativo hecho a medida para sus amigos”. La portavoz se ha referido a un cambio en la normativa urbanística para redefinir lo que se considera una “obra de conservación” en edificios fuera de ordenación, haciendo que sean posibles reformas estructurales que ahora no se pueden hacer. Por otro lado, “está elaborando una nueva ordenanza de actividades, que probablemente incluirá la opción de conceder licencias en edificios fuera de ordenación, abriendo así la puerta a la reapertura del hotel”, ha subrayado la portavoz en Valencia.

El inmueble está fuera de ordenación urbanística y el Ayuntamiento y la formación valencianista apuesta por derribarlo y restaurar el cordón de dunas que había antes de la construcción del hotel pero los vecinos de urbanizaciones próximas y el actual equipo de gobierno, de PP y Vox, quieren reabrirlo como un hotel para mayores o alguna función parecida.

El hotel abrió en los 70 y cerró sus puertas en 2011 dejando un reguero de acreedores y convertido en propiedad pública porque tras los deslindes de la ley de Costas invadía el dominio marítimo-terrestre. El Ministerio de Transición Ecológica compensó en 2018 a los dueños del negocio —entonces BBVA y Caixabank— con una concesión de ocupación y aprovechamiento del edificio sujeta a la obtención de las licencias necesarias para volver a la actividad. Pero el Gobierno local de Compromís y PSPV dio por caducado el permiso.

“No vamos a permitir esta agresión ambiental” y, por eso, Robles ha anunciado que “si Catalá y su gobierno intentan conceder licencias de obra o de actividad al Sidi Saler, Compromís recurrirá a los tribunales para impedirlo”. La portavoz ha lamentado “la hipocresía de la alcaldesa del PP cuando por delante dice que quiere realizar el Parque Natural de la Albufera Reserva de la Biosfera y por detrás se dedica a hacer estas cosas”.

La diputada y portavoz adjunta en las Cortes Valencianas, Paula Espinosa, ha criticado con dureza el cambio de modelo urbanístico y de ordenación del territorio que está proponiendo el Consell de Carlos Mazón. En concreto, Espinosa se ha referido a la aprobación del decreto de Simplificación administrativa que permite construir a 200 metros de la playa, tras el que la diputada considera que estaría el plan urbanístico del Manhattan de Cullera. E incluso ha apuntado que tras el decreto de modificación de la ley de l’Horta, que desprotege 3.800 hectáreas de huerta, “estaría el proyecto de un campo de golf de El Puig”.

Para Paula Espinosa, el modelo de Mazón destruye todos los avances de protección que se establecieron durante los años del gobierno progresista del Botànic, y que están avalados por los tribunales, para poner en marcha de nuevo el modelo del pelotazo urbanístico. Está claro que el PP no ha aprendido nada de la dana”.