El edificio incendiado de Valencia en el que murieron 10 personas cambiará su fachada de aluminio por una de cerámica
La Audiencia de Valencia pidió en junio que se reabriera al considerar que no se había investigado, entre otras cosas, la relevancia que tuvieron los materiales
El edificio en el que murieron diez personas en un incendio en febrero del pasado año en el barrio valenciano de Campanar cambiará la fachada de placas de aluminio por una de cerámica. El material, tradicional en Valencia, ofrece “de manera natural e inherente, un comportamiento inmejorable como material incombustible”, explica en un comunicado el estudio de arquitectura Arqueha, encargado del proyecto que hizo la Torre Ikon, uno de los edificios más altos de la ciudad. Ahora es el responsable de la reconstrucción del edificio siniestrado del que solo quedó su esqueleto. Los técnicos determinaron, no obstante, que la estructura estaba en condiciones, por lo que los propietarios decidieron no demolerla, como se apuntaba en un principio.
El fuego devoró dos bloques con 138 viviendas y 13 plantas en las que vivían 450 personas de las que murieron diez. En menos de una hora el edificio era una antorcha. El fallo en un frigorífico originó el incendio, que pronto alcanzó el exterior y se propagó rápidamente por la fachada. El viento y el material inflamable que revestía el inmueble fueron la claves necesarias para la tragedia.
“La cerámica es incombustible, no arde”, explica Antonio Hospitaler, catedrático de Ingeniería de la Construcción en la Universitat Politécnica de Valencia. El experto matiza que “el revestimiento de una fachada tiene muchas capas y han dicho qué van a poner fuera pero no dentro. En todo caso cumplirán la normativa porque los arquitectos no se la juegan”. La mayoría de la cerámica de España se produce en la provincia de Castellón. “Se utiliza mucho. No es ninguna novedad tecnológica”, señala Hospitaler. El estudio Arqueha expone en un comunicado que “explorará las últimas tecnologías en la aplicación de la cerámica en cualquiera de sus expresiones formales: piezas extrusionadas, prensadas, vitrificadas, prefabricadas...”.
Esta alternativa sustituirá a los paneles de aluminio y polietileno que envolvían la fachada hace un año. “Cuando se construyó el edificio ese material era tecnología punta y no estaba regulado en la normativa”, recuerda Hospitaler. El catedrático explica que el problema “no estaba en el aislamiento térmico, que era lana de roca, sino en el polietileno, que arde con la mismo poder calorífico que la gasolina. Era una bomba”.
Un juzgado se cerró en fase de instrucción tan solo 15 días después de la tragedia. Pero en junio de 2024 la Audiencia de Valencia ordenó la reapertura del proceso que a día de hoy está en fase de instrucción.
Los vecinos claman justicia. “El fuego indudablemente se propagó de una forma anormal. Mientras no se conozca la verdad y la causa creemos favorable que se reabriera el juicio para dirimir responsabilidades y saber cuál ha sido la verdadera causa. La familias de los diez fallecidos tienen derecho a conocer la verdad”, explica Enrique Salvador, presidente de la Asociación de Propietarios Afectados.
El edificio del distrito de Campanar empezó a construirse en 2005 y terminó en 2009 por la empresa FBex, que quebró. Hace unas semanas terminaron los trabajos de limpieza y desescombro. Los vecinos decidieron reconstruir el edificio dejando la estructura. El presidente de la Asociación de Afectados, prevé que la reconstrucción del complejo empiece este verano y que en 2027 puedan volver a habitar sus casas. “No sabemos que coste tendrá la reconstrucción, ni si será suficiente con las indemnizaciones”, apunta Salvador.
“Los vecinos de Campanar ven como en este 2025 las cosas van hacia delante, pues entregaron a finales de diciembre el Proyecto Básico al Ayuntamiento de Valencia para solicitud de los permisos de obra”, explica el estudio de arquitectura. Sobre las próximas fases, el estudio explica en el comunicado que “en el equipo técnico participarán un grupo de ocho vecinos y una empresa referente en el desarrollo de Proyectos de Edificación e Ingeniería, como es SGS, que nos ayudarán en agilizar y enfocar la toma de decisiones, ya que los plazos y el tiempo, en este caso más que nunca, juegan en nuestra contra”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.