La Guardia Civil detecta ingresos de más de 300.000 euros en efectivo en las cuentas del cuñado de Rita Barberá

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha detectado ingresos en efectivo, por más de 300.000 euros en las cuentas personal y profesional del abogado José María Corbín, cuñado de la exalcaldesa de Valencia, la ya fallecida Rita Barberá. El informe, remitido al titular del juzgado que instruye el caso Azud, mantiene que Corbín cobraba comisiones de empresas adjudicatarias del Ayuntamiento de Valencia a través de dos fórmulas: una, la contratación de su despacho y otra, con ingresos en efectivo en sus cuentas. “La investigación desarrollada a lo largo de la presente instrucción, ha permitido aunar numerosos indicios en este sentido y que se suman a los ya existentes. Así mismo, no se han evidenciado elementos que desvirtúen esta hipótesis, pese a la gran cantidad de diligencias practicadas”, señala el informe.

Sobre los ingresos en efectivo que se detallan, la investigación sostiene que, entre 2005 y 2008, en las cuentas bancarias de José María Corbín y en la de la mercantil que lleva su nombre se realizaron ingresos en efectivo por valor de 308.272,03 euros y señala que estas imposiciones fueron “a menos” y, posteriormente, a un periodo “de práctica ausencia” entre 2009 y 2015, año en el que Barberá dejó de ser alcaldesa. El informe asegura que esos pagos “se corresponderían realmente con comisiones ilícitas desembolsadas en atención, a diversas adjudicaciones públicas o

decisiones de índole administrativa llevadas a cabo por el Ayuntamiento de Valencia”. Los ingresos son, en su inmensa mayoría, de cantidades redondas que llegan hasta los 30.000 euros. En una de las cuentas en las que se produjeron los ingresos, de la que eran titulares tanto Corbín como la hermana de la alcaldesa, Asunción Barberá, que además era la jefa del gabinete de alcaldía, los ingresos en efectivo detectados entre octubre de 2006 y octubre de 2008 suponen el 80% del dinero total de la cuenta.

Según el análisis efectuado, el dinero que acabó en las cuentas de Corbín sirvieron, en algún caso, para engordar una cuenta bancaria “caracterizada por presentar saldos negativos”. Desde esta se realizaron “pagos recurrentes relativos a enseñanza, cuotas de productos de financiación o contratos de seguros”. Se retiró dinero en efectivo y mediante cheques y también sirvió para el pago de un préstamo hipotecario de una vivienda en Jávea (Alicante) que figura a nombre de Corbín y de la que también se pagaron obras, 80.000 euros en efectivo, realizadas en 2005 y 2006.

El informe de la UCO incluye además el análisis de los mensajes de los teléfonos intervenidos a José María Corbín. “La mayor parte de estas comunicaciones habían sido borradas de los diferentes terminales móviles; si bien, las mismas han podido ser recuperadas a través de los métodos”, indica el informe. Entre los mensajes aparecen conversaciones con los concejales del equipo de Barberá con los que no tenía por qué tener relación alguna. La Guardia Civil apunta a que la investigación “evidencia que, previsiblemente a través de esta vinculación familiar, José María Corbín habría tenido acceso, contacto y vinculación en relación a asuntos de tramitación del Ayuntamiento, haciéndolo a través de otros miembros de la corporación municipal”.

Premios de lotería

El informe de la UCO dedica un apartado a los premios de lotería con los que fue agraciado José María Corbín por importe de 360.000 euros en 2006 y 60.000 euros en 2007. Las hijas de abogado declararon ante el juez que parte de la fortuna de la disponen procede de esos premios de lotería. El juez tomó declaración al presidente de la falla agraciada donde supuestamente compraron las papeletas que les reportaron estos beneficios. Este explicó el funcionamiento de la venta de papeletas y contó que el número de papeletas que cada uno adquiere es variable pero que habitualmente se sitúa entre cinco y diez. “Personas que tuviesen más de 30 papeletas cree que pudo haber en torno a 10″, indicó el presidente fallero en alusión a las que debió comprar el cuñado de Barberá para obtener un premio de 360.000 euros.

En su declaración, además señaló que Corbín “no es fallero” y que desconocía si tenía algún conocido en la falla pero que no lo había visto nunca por allí. “No hay ningún fallero que venda 30 papeletas a una misma persona ajena a la falla”, afirmó el presidente del colectivo que lo calificó de “prácticamente inviable”. El juez le preguntó por la posibilidad de que se hubieran vendido papeletas premiadas y el testigo adujo que hubo numerosos ofrecimientos para abonar entre un 10% y 15% más del importe del premio pero que normalmente eran personas vinculadas a entidades bancarias. “Los que compraban directamente no acudieron, acudían directores de banco y tal que decían, oye tengo clientes que podrían comprar y tal y os dan un 10 os dan un 15, habría 7, 8, 10 directores de banco, habría un intermediario”.