Nadia Calviño critica la competencia entre autonomías por bajar impuestos: “Acaban empobreciéndose”

La vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, ha criticado este jueves en Valencia la competencia entre las distintas comunidades autónomas por bajar los impuestos. “Tenemos que evitar la competencia a la baja que acaba empobreciendo las distintas comunidades autónomas. Un planteamiento que consiste en pensar que la bajada de impuestos es la solución no solo no es real, sino que, además, lo que se quiere es recortar servicios públicos en el futuro”, ha dicho la vicepresidenta primera en un encuentro organizado por la cadena SER en el Oceanogràfic. Calviño ha recordado que durante toda su trayectoria en instituciones europeas ha luchado contra la reducción de impuestos que “hacen empobrecer al sector público”, en la misma línea que otras organizaciones internacionales.

La ministra ha respondido así a la problemática sobre la armonización fiscal en España. El delegado de la SER en la Comunidad Valenciana, Bernardo Guzmán, también se ha referido en su pregunta a la crítica del Gobierno de la Generalitat valenciana, presidido por el socialista Ximo Puig, presente en el acto, que acusa a la Comunidad de Madrid, gobernada por Isabel Díaz Ayuso, del PP, de “dumping fiscal”.

Antes de someterse a las preguntas y ante un público formado principalmente por cargos públicos y empresarios, Calviño ha esbozado un panorama alentador, en el plano económico, de España. Ha destacado que la salud y la economía van de la mano y que la tendencia positiva en la creación de empleo de agosto continúa en septiembre. Ha ponderado “el enorme éxito del bono verde soberano” en el país, que “ha tenido una demanda de 60.000 millones de euros”, cuando estaba previsto que emitiese solo 5.000 millones. “Todo apunta a que España, como prevén los organismos internacionales, es uno de los motores de la recuperación económica y prevé crecer un 6,5% este año y un 7% el próximo”, ha abundado sobre la situación de uno de los países de la Unión Europea en los que más cayó el PIB durante la pandemia del coronavirus. Mientras hablaba, numerosos animales marinos se desplazaban de un lado a otro del enorme acuario a la vista del público que cierra el escenario del espectacular auditorio del Mar Rojo, en el complejo de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia.

Sobre las ayudas directas de 7.000 millones de euros a las empresas por la pandemia, Calviño ha indicado que el ritmo es distinto entre las autonomías porque a lo mejor las necesidades son distintas, y ha puesto como ejemplo que Baleares y Canarias han sido más rápidas en cubrir las convocatorias de ayudas, ya que su economía ha sufrido un deterioro más intenso por la pandemia. Las comunidades son las encargadas de repartirlas, si bien la mayor parte de ellas señalan que no conseguirán dar más fondos a menos que se cambien los criterios de elegibilidad que fija el decreto. El Gobierno alargará el plazo para repartirlas más allá del 31 de diciembre al no ejecutarse muchas de ellas. Ha constatado que el ritmo de ejecución de los proyectos es muy variable entre las comunidades, pero el Gobierno es “favorable a apoyar” a las que van más lentas con el objetivo de que los fondos lleguen a las empresas. Además, ha incidido en que ha pedido a la Unión Europea una ampliación del marco temporal para el año que viene por si fuera necesario adoptar medidas extraordinarias, aunque ha dicho que espera que no haga falta.

Por otra parte, la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha instado a los agentes sociales a alcanzar un acuerdo para subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI): “Sería un signo de responsabilidad por parte de todos”. Para Calviño, “es el momento de abordar esta subida”, de una forma “moderada” este año y continuar en la misma senda el próximo. La política ha valorado la “dedicación” y el “empeño” de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, cuando se le ha preguntado por sus diferencias con ella.

En todo caso, Calviño ha querido dejar claro que “si no se llega a un acuerdo, en última instancia la competencia del SMI es del Gobierno”, aunque espera que se alcance un pacto, del mismo modo que aguarda que ocurra con la Reforma Laboral y los ERTE de transición.

La ministra ha recordado que el actual Gobierno ya ha subido el salario mínimo un 30% y ahora espera que la recuperación económica y la creación de empleo “sea fuerte” y “permita continuar con la mejora del SMI” con el objetivo de llegar al 60% del salario medio, que es lo que “recomiendan los distintos organismos”.

Calviño no se ha mostrado preocupada por la inflación, que se ha disparado en España, con un alza interanual en agosto del 3,3%, y también en la zona euro de entorno al 3%. “Venimos de la preocupación por una inflación demasiado baja, por la deflación y la japonización de nuestra economía. Ahora no puede sorprender que esté subiendo con el crecimiento económico. No me preocupa la inflación en estos momentos. Tenemos que evitar que sea estructural”, ha comentado.