Un Cruïlla para mirar al futuro

El Cruïlla está de aniversario y ya se encuentra en plena adolescencia. No es por rebeldía juvenil por lo que ha presentado este jueves el cartel de edición número 15 sin la presencia de autoridad alguna, sino porque se las guardan, ha indicado Jordi Hererruela, su director, para cuando en mayo hagan balance de las pasadas 14 ediciones. En otro gesto no habitual, Herreruela ha ponderado la importancia de los patrocinadores del festival “gracias a quienes podemos poner unos precios que equivalen al de un solo artista actuando en el Sant Jordi”. Y también ha puesto el acento en la importancia de la escena local. “Muchos de sus artistas han crecido con nosotros”, ha señalado Herreruela, ante las posibilidades aún en fase de estudio de aumentar un escenario más en el Fórum y de tener un recuerdo al desaparecido Marc Lloret, “cuyo grupo Mishima es de los pocos que aún no han actuado en el Cruïlla por problemas de agendas y de planificaciones”.

La celebración más significativa del redondo cumpleaños del Cruïlla es que Love Of Lesbian, presentes en la presentación y tan orgullosos como responsabilizados por el desafío que han aceptado, actuarán dos días en el festival, el viernes con su concierto de gira 2025 y al sábado con un concierto estructurado en torno a un repertorio especial y con una lista de invitados aún configurándose en la que, dijo Santi Balmes, líder del grupo, “habrá talentos emergentes y artistas consolidados”. En este sentido se bromeó con que este año Mishima no podrá faltar en el festival.

El marco conceptual del Cruïlla fue expuesto por Herreruela en estos términos: “llevamos años de pop más bien frívolo en su contenido y simple en lo musical, y creemos que esto va a cambiar hacia fórmulas más comprometidas y una actitud más punk, beligerante y transgresora”. Y no se refería tanto a la presencia de Sex Pistols & Frank Carter (John Lydon nada quiere saber del tema) o de Fermín Muguruza, un veterano del festival en el que ha actuado en varias ocasiones, como a propuestas perfil Alcalá Norte (post-punk), Biznaga (pop de guitarras aceradas y letras reivindicativas) –ambos grupos destacados de la cosecha 2024-, o también la de The Messthetics & James Brandon Lewis, la sección rítmica del mítico grupo de hardcore Fugazi junto a un saxofonista de jazz.

En esa misma línea, en el cartel del festival que acogerá el Parc del Fórum del 9 al 12 de julio también figuran Saint Vincent, propuesta de art-rock que se ha llevado tres Grammys hace escasos días o Balma, una apuesta que se autodefine como “soft bakala” –título de su primer disco- y que ha permitido al director del evento decir que “los catalanes somos a veces demasiados serios para reírnos de nosotros mismos y este proyecto lo hace”. Otros nombres como Alanis Morrissette, Ben Harper, Girl In Red (pop intimista desde Noruega) o Gracie Abrans (artista loada por Taylor Swift o Billie Eilish) apuntan la idea de una música que va más allá de la diversión más liviana.

Otros nombres del Cruilla, que abrirá en su primer día con músicas urbanas para los más jóvenes, orillará la noche latina del jueves para acentuar otros tipos de baile y tendrá en las del jueves y el viernes las jornadas que se esperan más concurridas, son Texas, Kaiser Chiefs, Thirty Seconds to Mars, el grupo del polifacético Jared Leto; Dr. Calypso, la seminal y veterana banda catalana de ska; Quimi Portet; Minibús Intergalàctic, banda situada en la estela de proyectos como la Ludwig Band; Leon Bridges (soul), Pau Vallbé; Seu Jorge; Viva Suecia; León Benavente; Goran Bregovic; Lia Kali o Gavina MP3, proyecto que aúna riqueza literaria con fórmulas propias de los sonidos urbanos. En conjunto una programación puramente Cruïlla, en la que conviven desde el folk hasta los estilos más hedonistas.