Las rebajas empiezan bajo el fenómeno del descuento permanente

Las vitrinas de la Rambla de Barcelona anunciaban este martes la llegada de las rebajas, aunque los descuentos y promociones no llevaban mucho tiempo ausentes. En la tienda de una cadena de ropa infantil, dos dependientas explican que están constantemente poniendo y sacando las etiquetas del 30%. Durante el Black Friday el descuento se aplicó durante una semana, después tuvieron 15 jornadas sin reducciones, en cuestión de días volvieron las rebajas “para clientes”, que solo requiere abrirles una ficha, se retiraron para volver a implementarse a finales de año y actualmente vuelven a estar de rebajas.

El precio de los artículos cambia, pero los descuentos no les proporcionan una oleada de clientes. “Desde el Black Friday hasta hoy nuestras ventas han sido lineales”, afirma una de las trabajadoras. Los descuentos permanentes les suponen un reto para cumplir los objetivos de Navidad, que este año no han alcanzado. “Antes hasta el día 7 de enero nadie podía hacer descuentos, ahora siempre hay rebajas”, relata una de las comerciantes. Las trabajadoras consideran que la temporada navideña ha sido “más floja” que la anterior y con más presencia de turistas que de locales. La mayor competencia para las encargadas han sido las ventas online de su propia marca, donde también llegan las rebajas. “Debemos ser unas cracks a la hora de vender para que prefieran venir”, ironizan , y se quejan de aquellos clientes que usan la tienda como un escaparate para decidir qué pedirán por Internet.

Tampoco ha llegado a los objetivos de Navidad su vecina, una franquicia de zapatos desde donde cuelgan etiquetas de descuentos al 50%. “Tengo la sensación que la gente se espera a las rebajas para comprar”, explica la encargada. En la misma calle, la dependienta de una cadena de lencería observa que los descuentos son más agresivos este año. Cuando etiquetaba se ha fijado que los artículos que solían estar al 30 o 40% se sitúan ahora a mitad de precio. “Los descuentos que solemos tener las segundas rebajas se aplican ahora”, resume la trabajadora. En la franquicia han tenido promociones cada semana desde el Black Friday, a finales de noviembre, pero no han conseguido igualar las ventas del año pasado.

El primer día de rebajas los compradores vienen a “rectificar lo que los Reyes han hecho mal”, bromea la dependienta mientras cambia los productos de una clienta. Trabaja en un comercio local de ropa para mujer que se resiste a hacer descuentos antes de que terminen las vacaciones y hayan pasado los Reyes: “Ahora tiene más sentido porque se está liquidando la temporada”. No participa en el Black Friday y considera “deshonestas” las rebajas permanentes de las cadenas. El local, situado también en la Rambla, no solo ha notado unas navidades más flojas en los números, también ha presenciado “menos montañas de ropa junto a sus probadores, menos gente y menos sensación de movimiento”.

El presidente de Barcelona Comerç, Pròsper Puig, prevé una “buena” campaña de rebajas en la capital catalana, entre otros motivos porque el frío puede animar las compras. El presidente de la entidad ha pedido a los clientes que no se dejen “engañar” por los grandes descuentos de hasta el 70%, ya que considera que “o está muy inflado el precio de venta al público o son descuentos que no se pueden justificar”. Puig ha afirmado que, tras un octubre y noviembre “bastante flojos”, la campaña de Navidad ha sido “muy buena”.