El Espanyol arremete contra la Sala Beckett por una obra donde se menciona a un jugador ficticio del club acusado de violación

De la ficción a la realidad. La obra Cacophony que se representa en la Sala Beckett de Barcelona ha indignado al RCDE Espanyol porque los personajes de la obra mencionan a un futbolista de ficción acusado y absuelto de violación que es jugador del club. “Es una falta de respeto. No podemos tolerar que se nos pueda relacionar con esta problemática, más aún cuando, en nuestro club, nunca se ha vivido una situación como la que se plantea”, planteó el sábado la entidad en un comunicado.

Según defiende la institución cultural en un comunicado de réplica este domingo, los personajes hacen referencia durante la obra de teatro “a un jugador inventado del Espanyol que figura que ha sido acusado y absuelto de violación”. La escena, añade la Beckett, “sirve para que los personajes discutan, con dos o tres únicas réplicas, si el hecho de tratarse de un jugador de Segunda División puede haber influido o no sobre la sentencia”. El jugador en cuestión, insiste la sala, “ni siquiera aparece en la obra” y la trama sigue “hacia otros asuntos que se derivan de este hecho”.

La propia Beckett lamenta la posición del Espanyol porque, asegura, “demuestra un absoluto desconocimiento de los hechos y una ignorancia total del sentido de la cultura en democracia”. Y añade: “[El comunicado del club] supone un atentado directo, ya no sólo contra la libertad de expresión, sino contra la dignidad misma del teatro y del arte en general, alimenta irresponsablemente una falsa polémica, y pone en peligro la integridad de personas concretas”.

El club menciona directamente en su comunicado el nombre de la directora de la obra, que ha recibido en las redes sociales las iras de algunos seguidores del Espanyol. “El sábado, alguien que ni siquiera ha visto la obra, hizo un tuit indignado y desató (como suele ocurrir en estos casos) todo un alud de comentarios y de insultos de otra gente, que mayoritariamente tampoco han visto obra, pero cada vez más agresivos y amenazantes contra la Sala Beckett y contra artistas implicados en el espectáculo”, prosigue la Beckett.

El Espanyol se ha puesto en contacto directamente con el director de la Sala Beckett, según informa el club, para poner de manifiesto “el enojo que genera esta situación”. “Es un tema tan sensible como la sensibilidad que pedimos por nuestro club. Siempre estaremos en contra de la violencia, las actitudes reprobables y que es necesario erradicar, como las que muestra la obra”, concluye la entidad deportiva.

Tras el comunicado del Espanyol, la Beckett remarca en su posicionamiento la necesidad de “diferenciar a los actores de los personajes”. “Hay que entender que lo que ocurre en el escenario, —y lo que se dice— no es nunca verdad. Esto requiere un pequeño esfuerzo intelectual, todo el mundo puede hacerlo, no es difícil, y es una manera de poder tomar distancia sobre la propia condición humana y evitar, así, posicionamientos fanáticos”.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal