El PSC avisa de que no negociará los Presupuestos si antes no se cumplen los acuerdos sobre el aeropuerto, la B-40 o el Hard Rock
La portavoz socialista Alícia Romero invita a Aragonès a crear una “mesa del agua” para abordar los problemas de la sequía
El Govern de Pere Aragonès tiene la firme decisión de aprobar unos nuevos presupuestos para 2024, su último año de mandato, pero su principal aliado, el PSC, avisa de que de momento no tiene la intención de abordar esa negociación. Alícia Romero, portavoz socialista, ha afirmado este mediodía en el Parlament que su grupo no empezará a discutir el proyecto hasta que no reciba del Govern garantías de cumplimiento de los tres acuerdos en infraestructuras pactados este año: la comisión para analizar la ampliación del aeropuerto, el impulso de la B-40 y del Hard Rock en Tarragona.
El pacto sobre esas tres infraestructuras, exigidas por el PSC, fueron capitales para desencallar los presupuestos de este ejercicio. Los socialistas aseguran, sin embargo, que no evolucionan como estaba previsto: la comisión sobre El Prat se tiene que crear este año y aún no se ha hecho; no se ha firmado el convenio sobre la B-40 -solo se ha rubricado un protocolo y las dos partes están pendientes de la reforma de la ley de carreteras- y la aprobación por parte del Govern de los informes medioambientales del Hard Rock.
Romero ha expresado que su grupo no está contento con el grado de ejecución de las 282 medidas pactadas ni tampoco con el de las tres grandes infraestructuras. “No negociaremos los presupuestos de 2024 hasta que no tengamos garantías de cumplimiento”, ha dicho la portavoz. Las consejeras de Presidencia, Laura Vilagrà, y la de Economía, Natàlia Mas, se reunieron con Romero el 8 de noviembre para abrir la negociación, pero los socialistas no tienen esa visión. “Fue una no reunión que duró 10 minutos. Les dije a las consejeras que no negociaríamos sino arreglaban lo de 2023. Podemos ser empáticos, pero hay medidas que se tienen que cumplir de todas”, ha dicho.
Salvador Illa, líder del PSC, ya advirtió a Aragonès que no pondrían “el caballo antes que el carro” para que acelerara con los acuerdos de hace un año y no diera la negociación por segura. Con todo, ERC y el PSC parecen condenados a repetir la alianza al necesitarse mutuamente para aprobar los presupuestos tanto en el Parlament como en el Congreso.
Los socialistas afirman que el Govern debería de crear una mesa del agua ante la grave sequía que sufre Cataluña
En medio de la grave sequía que sufre Cataluña, Romero ha acusado al Govern de no acelerar tampoco con las obras como la ampliación de la desaladora de Tordera y las plantas regeneradoras del agua. “Están contempladas y no avanzan”, ha lamentado. El grupo parlamentario del PSC, que se reúne cada dos semanas en un cónclave que denominan el “Govern alternatiu”, ha decidido crear una mesa semanal del agua que liderará la diputada Silvia Paneque. “Como no nos convocan, hemos creado una mesa del agua. Eso debería hacer el Govern. Lo que preocupa a los ciudadanos y a la industria es que llegue un día que no salga agua del grifo”.
Tras acusar al Ejecutivo de no haber planificado con antelación infraestructuras -”No se trata solo de mirar al cielo y quejarse de que no llueve”-, la diputada ha pedido a Aragonès que en la reunión que mantendrá el día 21 con Pedro Sánchez en el Palau de la Generalitat le plantee también el tema de la sequía y que represente a todos los catalanes, en alusión a quiere empezar a negociar el “conflicto político” de Cataluña además de Rodalies y el nuevo modelo de financiación.
Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.