Muere Llum Ventura, la activista que afirmaba: “Por mis orígenes familiares, soy anarquista”

Llum Ventura nos dejó la noche del pasado sábado, de manera repentina y en paz. Sus hijos e hija, nietos, nietas y compañero de vida, así como su extensísima familia escogida, nos despedimos de ella este lunes 10 de julio. Llum era de todas. Como dijo su hija, su corazón era muy grande porque cabía todo el mundo. Generosa, solidaria y ejemplo de apoyo mutuo; vital, libre de cualquier compromiso que no fuera la lucha por la justicia y la libertad, siempre con una sonrisa.

Llum era activista de corazón. Como ella reivindica en su autobiografía, escrita en 2017, sus orígenes familiares la llevaron a ser anarquista y feminista. Hija, nieta y sobrina de anarquistas, reivindicó su carácter libertario hasta el final. Su vinculación más estrecha con el activismo feminista llega en 1972 cuando, a raíz del nacimiento de su cuarto y último hijo, conecta con la impotencia que sufren las mujeres que quieren abortar. Al lado de estas mujeres sale a la calle declarando “yo también soy adúltera” e impulsa la creación de la peluquería La Mar, donde corta el pelo pero también asesora a sobre cómo abortar clandestinamente y de forma segura. Esta peluquería feminista creada por Llum tiene continuidad más tarde con La Pelu, un nuevo concepto de peluquería acercada a las mujeres de la calle y del barrio, que llevó hasta Sarajevo cuando la guerra de los Balcanes finalizó.

Llum participó también en las instituciones, siempre con un sentido libre e independiente, para defender los derechos de las mujeres y los más desposeídos, como los manteros o las putas. Como consejera de Distrito en el Ayuntamiento de Barcelona fue la gran impulsora de la recuperación histórica de les “Dones del 36″, mujeres supervivientes de la guerra civil.

Cuando no pudo realizar su actividad con total libertad, antepuso sus principios al compromiso institucional y volvía a las luchas a pie de calle. Su mayor orgullo siempre fue el apoyo que recibió de la gente del Raval y del Gòtic cuando el PP le pidió la dimisión por su apoyo a los manteros. Con una sonrisa en la boca y un compromiso firme, más tarde lo dejó para seguir haciendo lo que siempre fue su vida. Por eso todo el mundo la quería tanto, y por su valentía y decisión, afectuosa y cariñosa, siempre con los más débiles. Su feminismo libertario la hizo una persona única e irrepetible de la que, como se ha dicho en la despedida, esperamos que su luz siga irradiando para todas.

Las personas que te conocimos y los colectivos donde has participado (Dones del 36, El Lokal, Àgora Juan Andrés, La Negreta del Gòtic, Resistim al Gòtic, Ca la Dona, la Coral Popular del Raval, Iaioflautas, l’Antiga Massana, el Col·lectiu Jardins de Sant Pau, Tras La Manta, Putas Libertarias, CAP Raval Nord Digne, CGT Acció feminista, Tanquem els CIEs, l’Òstia, la Xarxa Veïnal del Raval, y muchas otras) te echaremos mucho de menos y no te olvidaremos nunca.

Martí Cusó, Iñaki García, Janet Mérida y otros integrantes de La Negreta del Gòtic, el Lokal del Raval y Putas Libertarias

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