El Círculo de Economía pide un Ayuntamiento de Barcelona que “genere ilusión” y que rehaga puentes con la empresa

La economía catalana está aquejada por problemas pendientes de resolver, como el de “la fuga de empresas” sufrida durante el procés o el bloqueo a la ampliación del aeropuerto de El Prat. A una semana de las elecciones municipales, el influyente Círculo de Economía da otro tirón de orejas a los políticos con una llamada a revertir la situación y, en lo que respecta a Barcelona, no esconde una visión compartida ya desde otros vértices del mundo de la empresa: “Hay que impulsar un proyecto que sea movilizador y genere ilusión” y que “reconstruya la maltrecha alianza entre el Ayuntamiento de Barcelona y el sector privado”.

El análisis de la entidad, liderada por el exbanquero Jaume Guardiola y una junta formada por empresarios, directivos y académicos, avala con estadísticas las conclusiones de su última nota de opinión, titulada Reactivar el futuro. La denuncia por el “estancamiento” de la comunidad se sostiene por un nivel de renta per cápita que en 2021 fue muy similar al de dos décadas antes y por un preocupante retroceso en comparación con España y la Unión Europea. Si en 2000 Cataluña estaba un 24% y un 20% por encima de España y Europea, respectivamente, ahora esas diferencias son de apenas el 17% y el 1%. Apenas los mejores datos de 2022 han podido suavizar ese “declive”, que dificulta la creación de empleos de alto valor añadido y fuerza el éxodo del joven talento interno por falta de oportunidades. En el mismo periodo España sufrió una caída respecto a la Unión Europea, pero menor: estaba un 9% por debajo y ahora ese porcentaje es del 17%.

El Círculo sostiene que esa dinámica económica ha conllevado a un “progresivo deterioro” de algunos servicios básicos, situando la atención primaria y la red ferroviaria de Rodalies como ejemplos más palmarios. “Estamos en un ritmo inversor alto, pero hay tanto déficit acumulado que la sociedad ya no se lo traga”, ha afirmado Guardiola, reconociendo que “Rodalies está muy al límite”.

Sin embargo, la entidad se fija en otras dos cuestiones que, en su opinión, agudizarán el problema a largo plazo. Una es la marcha de empresas a través de cambios de domicilios que se produjo en el otoño de 2017 a raíz del referéndum independentista, en el momento más grave del procés, y que “a la Generalitat corresponde crear las condiciones” para que pueda haber un camino de regreso y paliar el “efecto reputacional” causado. El otro es el de la ampliación del aeropuerto de Barcelona, de resolución urgente -“no puede dilatarse mucho”, afirma el texto- y cuyo bloqueo definitivo “tendrá un coste de oportunidad astronómico para la economía catalana”. La entidad llama la atención al Gobierno catalán, a la que atribuye la responsabilidad de asegurar la inversión y que esta beneficie sobre todo al impulso de los vuelos de largo radio.

Pese a los avisos a la Administración catalana “por la década perdida” del procés, el Círculo de Economía sí ve avances, que celebra, respecto a años recientes. Por ejemplo, aplaude “un meritorio giro pragmático” del Ejecutivo de Pere Aragonès y “una oposición que apuesta por superar la dinámica de bloques”, después de que a principios de año permitiera aprobar los Presupuestos autonómicos. Ambas cuestiones podrían ayudar a resolver la falta de “liderazgo económico” que “los últimos años nos ha fallado mucho”. El documento también introduce una demanda dirigida hacia el Gobierno central, como es la necesaria mejora del sistema de financiación y un aumento en la inversión estatal en Cataluña.

Más colaboración privada en Barcelona

Por lo que se refiere a Barcelona, la entidad denuncia el incremento del precio del alquiler y una “percepción de deterioro de los servicios básicos”, sobre todo en materia de movilidad, seguridad y limpieza. Lamenta igualmente que durante los últimos años -en ningún momento nombra a la alcaldesa Ada Colau como tampoco lo hace a Pere Aragonès- “el sector privado ha vivido bajo sospecha”, factor que censura: “Eso tiene que cambiar”. Guardiola ha señalado que ni el sector público por sí solo ni el privados serán capaces de resolver todos los problemas.

El organismo reclama la búsqueda de consensos, sobre todo en decisiones como la ejecución de las superilles, de las que denuncia que se han construido sin haber dotado de transporte público a la ciudad y que crearán mejoras diferenciales entre calles. “La transcendencia de esta intervención urbanística”, apunta el documento, “nos lleva a reclamar más debate, análisis y consenso antes de emprender nuevas acciones”. El director general del Círculo, Miquel Nadal, ha llamado a dar más poder a la región metropolitana de Barcelona (de unos 160 municipios) y darle más capacidad de gobierno.

La larga nota de opinión del Círculo, no publicada tanto por la cita electoral sino como posicionamiento previo a las tradicionales jornadas que abrirá el próximo lunes, también señala al Gobierno de Pedro Sánchez, al que libra de tener “falta de liderazgo”. El problema en España, en su opinión, es una gran polarización entre PSOE y PP que impide sacar adelante “una agenda reformista dialogada y consensuada”. Sobre las normas aprobadas, la institución advierte de las “contraindicaciones” que puede tener la Ley de la Vivienda (en lo que respecta a la delimitación de precios o la penalización a grandes tenedores), la reforma de las pensiones (el gasto público subirá de “forma sustancial” y subirán los costes laborales), o el bajo nivel de ejecución de los fondos europeos. Todo eso lo enmarca en una situación económica en la que ha costado 15 años recuperar los niveles de renta que dejó la crisis financiera a partir de 2007 y que la ha lastrado en comparación con el conjunto de la Unión Europea.

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