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Archivada la causa por la grabación con móvil en las oposiciones de los Mossos

El juzgado de instrucción considera que no hay suficientes pruebas inculpatorias contra el único inspector investigado

Rebeca Carranco
Los agentes de los Mossos y policías locales celebran su graduación al finalizar el acto de entrega de los diplomas de la 32 promoción.
Los agentes de los Mossos y policías locales celebran su graduación al finalizar el acto de entrega de los diplomas de la 32 promoción.Susanna Sáez (EL PAÍS)

El juzgado de instrucción 8 de Barcelona ha archivado la causa abierta por la colocación de un móvil grabando en las oposiciones de los Mossos d’Esquadra. El teléfono lo halló el tribunal evaluador, que se había reunido en una sala de la comisaría de Les Corts, en Barcelona. La presidenta dio con el aparato antes de que empezara el encuentro, donde se debatían las preguntas. El único inspector imputado en la causa como sospechoso de colocar el móvil en beneficio propio para ascender a intendente ha sido exculpado en la vía penal, después de que el juez no hallase indicios inculpatorios suficientes contra él. La Dirección General de la Policía proseguirá ahora con la vía administrativa y decidirá si sanciona o archiva también la investigación que afecta al mando policial.

El teléfono se encontró grabando y sin tarjeta SIM el pasado 22 de septiembre. El hallazgo obligó a suspender cautelarmente las pruebas internas de acceso a inspector e intendentes, y causó un sonado revuelo en los Mossos d’Esquadra. El móvil, indicaron fuentes policiales, fue detectado antes del encuentro y no tuvo tiempo de registrar ningún detalle, pero el Departamento de Interior prefirió retrasar la convocatoria. Las oposiciones se celebraron casi dos meses más tarde de lo previsto, y paralelamente la División de Asuntos Internos asumió el caso, que se judicializó. En octubre, el juzgado imputó a un inspector de los Mossos, Jordi H., como el principal sospechoso de haber colocado el teléfono móvil.

Todas las miradas se dirigieron al mando policial casi desde el principio: era de los pocos que tenía acceso al lugar donde se reunía el tribunal porque él mismo formaba parte en las pruebas de ascenso a inspector, lo que le permitía entrar al espacio sin levantar sospechas. “Desde el inicio fue el sospechoso principal de todos”, indican fuentes policiales. Pero finalmente, la investigación no ha podido acreditar de manera fehaciente que fuese el propietario del móvil que encontraron en la sala. Por ese motivo, el juzgado archivó el sábado la causa que tenía abierta por un posible delito de revelación de secretos en grado de tentativa.

El inspector se encontraba destinado en el momento de los hechos en la División de Evaluación de Servicios (DAS), que depende directamente del director de la policía, Pere Ferrer, y que dirige el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, desde que fue destituido como jefe del cuerpo. La DAS tiene su sede en la comisaría de Les Corts de Barcelona, donde se celebró la reunión del tribunal para las pruebas a inspector e intendente. Como medida cautelar, el inspector fue trasladado a la sede central de la policía catalana en Sabadell, en Egara, a la espera de la evolución del caso.

La exoneración por la vía penal del inspector no supone que se acaben todas las acciones ante su presunta implicación en el intento de grabar la reunión. La Dirección General de la Policía catalana reabre ahora la vía administrativa que se paralizó en su momento ante la investigación penal, y deberá decidir con las pruebas con las que cuenta si le sanciona o archiva también el caso. Mientras tanto, el inspector continúa, como medida cautelar, destinado en Egara.

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Sobre la firma

Rebeca Carranco
Reportera especializada en temas de seguridad y sucesos. Ha trabajado en las redacciones de Madrid, Málaga y Girona, y actualmente desempeña su trabajo en Barcelona. Como colaboradora, ha contado con secciones en la SER, TV3 y en Catalunya Ràdio. Ha sido premiada por la Asociación de Dones Periodistes por su tratamiento de la violencia machista.

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