Respuesta masiva de la ciudadanía para dar sangre en Cataluña ante la falta de reservas

El Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña (BST) advierte que en las últimas semanas han bajado las donaciones y las reservas actuales se sitúan en cuatro días, la mitad del suministro actual. Este miércoles, aunque sea festivo, se podrá acudir a dos hospitales de Barcelona (Clínic y Sant Pau), uno en Tarragona (Juan XXIII) y un puesto móvil en Besalú (Girona). Se pueden consultar los puntos de donación disponibles en donarsang.gencat.cat, repartidos entre 12 hospitales y una red de puestos móviles por toda la Comunidad.

El BST dispone de unas 4.000 bolsas de sangre en las reservas totales cuando suele tener unas 8.000, según indica su director asistencial, Joan Ramon Grifols. Aunque señala que no hay una “única causa” para explicar esta escasez, destaca que los donantes habituales están “desentrenados”; se ha reducido la frecuencia con la que acuden a los puntos de donación desde el confinamiento de 2020. “Si mucha gente pasa de venir de dos veces a una vez al año, al final eso acaba repercutiendo”, comenta Grifols. Los hombres pueden donar hasta cuatro veces al año y las mujeres tres. Además, indica que antes de la covid estaban más localizadas las épocas con pocas donaciones: “Normalmente antes de las vacaciones de navidades, semana santa y en la vuelta al cole. Ahora es un poco más impredecible”.

El llamamiento del organismo a la ciudadanía, el lunes, ha tenido un efecto inmediato: los donantes no cabían este martes en la sala de espera de la unidad de donación del Hospital Clínic de Barcelona. Engracia Rodríguez, promotora del BST, se alegra de que la ciudadanía “se haya volcado” desde la primera hora de este martes tras haber emitido la alerta. Llevaban varios días recibiendo a 50 donantes diarios, cuando la cifra habitual suele ser de 70.

A la salida de la unidad del Clínic se levanta Carla Martí, estudiante de ingeniería que ha donado por primera vez. Admite que desconocía la campaña de llamamiento y que quería venir ahora que se ha mudado a estudiar la carrera a Barcelona. También estaban reponiendo fuerzas algunos habituales en el Clínic como José Antonio Guerrero, que acude frecuentemente desde que conoció las unidad cuando su padre estaba ingresado hace ocho años. “Siempre paso por aquí cada vez que tengo que dejar el taxi en el taller o cuando acompaño a mi padre a una revisión”. Xavier Prat, de 59 años, también viene al hospital desde Parets del Vallès, “como mínimo una vez al año” desde 1989, cuando sufrió un accidente de coche. “No se puede parar de poner sangre, es una necesidad social que hay que cubrir”, comenta este biólogo.

Estos son algunos de los perfiles habituales del donante en hospitales. Los centros hospitalarios recogen aproximadamente el 35% de las reservas del BST, mientras que los equipos móviles captan la mayor parte. Varias trabajadoras de la Unidad del Clínic lamentan que, aunque las restricciones para entrar en el hospital ya no son tan duras, notan un descenso en comparación a las épocas precovid: “Mucha gente aún no ve los hospitales seguros. Además, hasta hace poco teníamos que ir hasta la puerta para que el vigilante dejara entrar al donante”.

Cataluña celebró la semana mundial de donación de plasma con récord de donantes

El director asistencial se muestra optimista con esta última campaña de recogida del Banco de Sangre. “El primer día de la llamada, este lunes, se registraron casi 900 donaciones diarias cuando el mismo día hace una semana fueron 600″. Asegura que con un ritmo de 1.100 donaciones al día podrá encaminarse bien el último trimestre del año para hacer frente a las transfusiones que requieren las operaciones y otras necesidades diarias.

El BST también ha hecho un llamamiento para aumentar las donaciones de plasma sanguíneo, con el que se fabrican medicamentos para miles de pacientes con inmunodeficiencia. Calculan acabar el año con 27.000 donaciones, el doble que hace cinco años. Sin embargo, desde el BST declaran que se necesitarían 60.000 donantes para lograr la autosuficiencia de este compuesto. Pero aclaran que el resto de Comunidades tampoco la tienen y que lo habitual es importar el plasma restante de empresas farmacéuticas.

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