La CGT se desmarca y mantiene la huelga en la recogida de basura en Barcelona
Los piquetes retrasan un par de horas la salida de vehículos en el parque de la Zona Franca
El sindicato CGT mantiene su convocatoria de huelga en el servicio de recogida de basura y limpieza viaria de Barcelona a partir de este domingo a las 21 horas y durante cinco días. La organización rechaza el acuerdo lalcanzado por UGT (el primer sindicato que convocó la huelga) y CC OO el pasado viernes por la noche sobre la recuperación de incrementos salariales pendientes desde 2018. CGT tiene un 10% de representación en la plantilla, que suma 4.000 empleados.
Los piquetes del sindicato han retrasado la salida de los camiones de recogida en el parque de la Zona Franca este domingo, donde afiliados de CGT se han enfrentado con gritos a un contra piquete de UGT. Ha habido incluso presencia de varias furgonetas de los Mossos d’Esquadra. Los vehículos han salido para comenzar su trabajo, aunque más tarde de lo normal, al filo de las 23 horas entre aplausos de unos y abucheos de los otros.
Además de los salarios, CGT plantea otras reivindicaciones sobre condiciones laborales, organización de turnos y reconocimiento de categorías: aspectos que deberían abordarse en la futura negociación del convenio o bien con las dos empresas que se incorporarán a la nueva contrata a partir de septiembre.
Fuentes de CGT critican que las empresas concesionarias (Urbaser, Cespa, FCC Medio Ambiente y CLD Sorigué) no les han llamado a negociar los incrementos pendientes, como sí hicieron con las otras dos organizaciones sindicales y consideran insuficientes las subidas pactadas. Sobre el resto de reivindicaciones, admiten “que la mesa sobre salarios no era el marco”. “Pero ya que convocamos huelga lo incluimos todo”, argumentan. Los dos parques de limpieza de la ciudad donde CGT tiene más representación son los que dan servicio a los distritos de Ciutat Vella y el Eixample. El departamento de Trabajo de la Generalitat dictó el viernes los servicios mínimos para los días de huelga.
En un comunicado del sábado, CGT tacha al sindicato UGT, el mayoritario, de “ser un sindicato amarillo al servicio de la empresa”. “El acuerdo firmado no recoge ninguna de las otras reivindicaciones, con lo que está demostrando que quiere mantener el enchufismo, el personal eventual trabajando de forma precaria, la designación de turnos, horarios y servicios asignados según criterio de la jefatura (tú me caes bien o me caes mal), etc.”, asegura el comunicado.
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