Cámaras submarinas para ver cómo comen los delfines

Un sistema de cámaras grabará como actúa el delfín mular (Tursiops truncatus) para alimentarse durante los lances de pesca en el norte de la Costa Brava. Este tipo de interacción se ha descrito en múltiples zonas del Mediterráneo y sucede de forma regular en aguas de la costa catalana, hábitat importante para el delfín mular. Sin embargo, se desconoce el impacto que estas interacciones tienen tanto en las operaciones de pesca como en la población de delfines de esta área. El objetivo del Proyecto COSTtERA (Comportamiento Submarino de Tursiops truncatus En Redes de Arrastre en el Norte de Cataluña) es estudiar qué hacen estos cetáceos cuando acuden a las artes de los barcos de arrastre, determinar el grado y tipo de interacción que existe en esta zona y prevenir daños para ambos.

Entre 2017 y 2021 el Proyecto Delfines de Tramuntana permitió a Submon, entidad destinada a la conservación, estudio y divulgación del medio marino, hacer un seguimiento del delfín mular en el Cap de Creus, estudiarlo y concluir que su presencia, más cerca de la costa y a menores profundidades, es mucho mayor que la del delfín listado.

La estima de abundancia entre las Illes Medes y Portbou (158.644 hectáreas) es de 820 ejemplares, una densidad de 0′00382 animales por kilómetros cuadrado. Esta densidad es “bastante elevada en comparación con otras áreas del Mediterráneo y de la costa catalana”, según Carla Chicote, jefa de proyectos de la entidad. Identificaron más de 400 animales mediante la foto-identificación, técnica que permite diferenciar a cada individuo a través de fotos de sus aletas dorsales, únicas como huellas dactilares. Un 66% fueron avistados cerca de pesqueros con conductas de alimentación y en igual medida se detectaron crías en el grupo.

Interacción animal

El proyecto concluyó que el Cap de Creus es zona de alimentación y cría del delfín mular porque gracias a la pesca tienen alimento todo el año. Además, encuestas realizadas —en colaboración con la dirección general de Política Marítima y Pesca Sostenible— a un 59% de la flota de arrastre de Cataluña, 125 pescadores, pusieron de manifiesto que todos ven interacción entre los delfines y pla esca. Un 93% la ven positiva por la atracción de peces a las redes y un 91% confirmó que alguna vez había capturado un ejemplar. La mayoría, muertos. Esta evidencia ha llevado a Submon al proyecto COSTtERA , con la colaboración de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio por la Transición Ecológica, a través del Programa Pleamar, cofinanciado por el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP).

La interacción entre mulares y pesqueros de arrastre se da en áreas donde ambos quieren capturar las mismas especies. El estudio se hará de enero a octubre en la zona norte de Cataluña, analizará cómo se comportan los delfines cuando persiguen a las redes de pesca y las cámaras grabarán si se adentran en ellas para alimentarse durante los lances de pesca y cómo lo hacen. La prueba piloto ha empezado con dos arrastreros de Llançà y Roses (Alt Empordà), trabajando con los pescadores para diseñar el estudio y acordar tanto el mejor equipo y material a utilizar, como el mejor momento y lugar para ubicar las cámaras en las redes. Además, Submon registrará los datos de la conducta de los delfines en superficie. Todo ello se analizará para crear patrones que se repitan y se relacionen con las imágenes captadas por las cámaras, se asociarán los comportamientos en superficie con los de bajo el agua.

El proyecto incluye salidas en los dos barcos en diferentes épocas del año, —fría, cálida y período de veda— que también permitirán saber el grado de dependencia de las poblaciones de mulares de este tipo de pesca. Durante estas salidas se harán fotos para identificar a los ejemplares. Estos datos permitirán determinar el porcentaje de asociación pesquera, la densidad de individuos y su distribución en la zona, así como si hay diferencias estacionales o en presencia y ausencia de arrastreros.

Posteriormente, biólogos y pescadores visualizarán las imágenes y compararán la conducta registrada de los delfines y la actividad pesquera asociada (zona, capturas, etc). En base a la experiencia de los pescadores y a los datos obtenidos se concretará el resultado de estas interacciones y definirán las mejores prácticas pesqueras para poder minimizar el impacto tanto en la pesca como en los cetáceos. Los responsables del proyecto esperan que los resultados aporten información útil para conocer mejor los hábitos del delfín mular en la zona y poder proponer futuras mejoras para su conservación.