Badalona contrata a quince trabajadores sociales tras la denuncia de falta de recursos

El Ayuntamiento de Badalona ha contratado este jueves a una quincena de trabajadores sociales para reforzar un servicio cuya falta de medios fue denunciado a principios de año por las plataformas antidesahucios, sindicatos y colegios profesionales. La quincena de empleados se distribuirá por toda la ciudad y tendrán un contrato de tres meses, prorrogables. El Consistorio, dirigido por el socialista Rubén Guijarro, funciona con las cuentas ordinarias prorrogadas desde 2019 y está sujeto a esa modalidad de contratos hasta que se aprueben los nuevos presupuestos.

De la quincena de personas, seis son trabajadoras sociales, cuatro educadoras y cinco asumirán tareas administrativas adscritos al Servicio Básico de Atención Social (SBAS) y al de Dependencia. La situación crítica de los servicios sociales de Badalona afloró después de que una trabajadora social revelara en una carta pública que a partir del día 10 se quedaría como única empleada en Sant Roc junto a dos educadoras. La denunciante exponía que solo el barrio del Raval en Barcelona, con una problemática equiparable a la de Sant Roc, dispone de una decena de empleados.

David Torrents, tercer teniente de alcalde y edil de Protección Social, de Junts, ha admitido que no se trata de una “solución definitiva” pero que contribuirá a mejorar el servicio y empezar a revertir la situación. Carles Sagués, portavoz de la plataforma Sant Roc-Som Badalona, ha dado la “bienvenida” a las incorporaciones y a la mayor implicación del Ayuntamiento. “Ayudarán hacer algo más pero son claramente insuficientes. Se necesitan muchos más recursos”, ha recalcado, advirtiendo de la profundidad y de la gravedad de la crisis social que asuela la ciudad, motivo por el cual señala que debería activarse un gabinete de crisis. Solo en estas dos últimas semanas, la plataforma ha conseguido frenar el desahucio de 21 familias. Dos de ellos se paralizaron ayer. En dos de los últimos casos había involucrados nueve niños.

Sagués ha agregado que además de la necesidad de reforzar los servicios sociales se debe volver a dotar de recursos la Oficina de Vivienda, ahora prácticamente “desmantelada” al sostener que el principal problema ahora son los desahucios. Gran parte de los inmigrantes de la nave de la calle del Progrés, desalojada por los Mossos, están ahora en un hostal municipal, donde podrán permanecer hasta un máximo de tres meses. Solo tres o cuatro antiguos ocupantes siguen acampados en la calle.