“La recuperación del turismo será a partir de junio”

Eduard Torres (Barcelona, 1968) asumió la presidencia del consorcio Turisme de Barcelona- conformado mayoritariamente por la Cámara de Comercio y el Ayuntamiento de Barcelona- en noviembre de 2019. Un año que fue récord turístico en la capital catalana con 12 millones de visitantes y también con máximos de número de congresos y convenciones. “El debate se centraba entonces en cómo poner freno a la masificación turística y a la gentrificación y empezábamos a trabajar en una estrategia para corregir lo que no funcionaba. Llegó la pandemia y ahora se ha evidenciado lo importante que es la actividad que comporta el turismo para la ciudad porque se ha visto: calles vacías, restauración cerrada y comercios a medio gas en las zonas más turísticas”, apunta torres, fundador de la cadena de hoteles Grup Duquesa.

La entrevista se hace en el Duquesa de Cardona, un cuatro estrellas al pie del paseo de colón de Barcelona y desde cuya terraza casi puede tocarse la escultura que remata la basílica de la Mercè. Como hotelero decidió reabrir el establecimiento al final del confinamiento de la primavera de 2020: “Antes de la pandemia el 80% de los clientes que teníamos eran extranjeros y en el último año el 50% han sido barceloneses. Ha sido toda una oportunidad para reencontrarnos”, añade.

Ya con la gorra de presidente de Turisme apunta que en cuanto el ritmo de la vacunación sea más intenso y se pacte un certificado sanitario para viajar, los visitantes volverán a Barcelona: “El disparo de salida del turismo será a partir de junio. Las líneas aéreas ya están programando viajes a partir de ese mes, algo que es vital para Barcelona al ser el medio que utilizan para llegar el 80% de sus visitantes. Una cosa importante es que en parte del mercado emisor de turismo hacia España, como el inglés, el ritmo de vacunación estás más avanzado”, comenta.

Cree que en este momento la salud se ha convertido en un eje central a la hora de escoger destino: “Y desde Barcelona hay que transmitir la imagen de destino seguro con un sistema biomédico muy importante”. Torres está convencido de que el resultado de las primeras convenciones, como la del MWC, será determinante para promover esa sensación de seguridad.

“Aspiramos a lograr la mitad de lo que se conseguía antes de la pandemia”

Si las cosas van bien, el presidente de Turisme de Barcelona pronostica que el relanzamiento del turismo, más el vacacional que el de negocios, se consolidará en el segundo semestre del año: “A lo que aspiramos es a alcanzar la mitad de lo que se conseguía en un año de antes de la pandemia”. ¿Cinco millones? “Pero prefiero no vaticinar cifras, porque todo dependerá de la pandemia”, matiza.

Sí tiene claro, por el contrario, lo que ha supuesto el parón por la covid. Barcelona y su área de influencia representan la mitad de la facturación del sector en un año, en números redondos unos 15.000 millones y en 2020 la caída fue de un 70%. Es decir, que se han perdido 10.000 millones de euros. Tampoco quiere pronosticar qué pasará con la planta hotelera de la capital de más de 400 hoteles: “Es probable que haya cambios de propiedades, pero la marca es fuerte”.

El segmento del turismo ligado a empresas y convenciones representa el 40% del total en Barcelona. Torres cree que las empresas recortarán el número de personas que se desplacen a una feria porque el teletrabajo puede asumir algunas reuniones “pero cuando se trata de hacer y cerrar negocios la presencialidad es imprescindible y Barcelona sigue estando bien posicionada. En los próximos años hay agendadas y confirmadas 100 ferias y congresos y estamos trabajando en 125 candidaturas abiertas en los próximos años”.

El parón forzoso de la actividad turística ha servido para volver a enfocar el tipo de visitante que se quiere. El turismo vacacional sigue siendo el predominante en el área barcelonesa: el 60%. “Nos tenemos que reencontrar con el turismo de otra manera. Hay que hacer promoción del visitante que queremos que es el vinculado a la cultura, la ciencia y la innovación. Cada visitante antes de elegir destino consulta entre 19 y 25 páginas web. Ahora estamos trabajando en una digitalización que incorpore unas herramientas tecnológicas para segmentar a los potenciales interesados en Barcelona en función de sus intereses”, explica.

Una de las ventajas para esa promoción dirigida es que muchos visitantes, alrededor de un 60%, son repetidores. Para evitar la concentración en las mismas visitas a unos cuantos puntos de interés, la Sagrada Familia, la Pedrera y el Park Güell, por ejemplo, Torres opina que hay que ampliar la oferta. “Ya la tenemos, hay que poner en valor otras zonas de Barcelona, como el Poblenou y, sobre todo, trabajar conjuntamente con el territorio para ofrecer experiencias distintas al turismo de masas”, apunta. En su opinión, esa será la mejor manera de atraer a un tipo de turismo más respetuoso y evitar a los visitantes que pueden resultar dañinos al modelo de Barcelona y a la convivencia con los residentes.