Interceptan en Sitges a un niño de nueve años conduciendo un coche con un bebé en el asiento trasero

La Policía Local de Sitges ha enviado a la Fiscalía de Menores el atestado abierto por dos agentes del cuerpo que interceptaron, en una calle del municipio, a un niño de nueve años al volante de un coche donde viajaba un bebé de tres meses en el asiento trasero. En el mismo vehículo la policía identificó, sentada en la posición del copiloto, a la madre de los dos menores. Al ser interpelada por los agentes la mujer alegó que no apreciaba gravedad ninguna en la conducta de su hijo mayor y, según fuentes de la policía local, mostró sorpresa cuando se le comunicó que se la denunciaba por un delito contra la seguridad del tráfico, en condición de cooperadora necesaria.

La mujer ha acudido este viernes a la comisaría de la policía de Sitges asistida de un abogado y de un traductor y ha ratificado que no era consciente de que poner a su hijo a cargo del volante pudiera ser merecedor de reproche penal. Con nueve años el niño es inimputable pero la policía de Sitges ha puesto los hechos en conocimiento de la Fiscalía por si procede adoptar alguna medida relacionada con la guarda y custodia de los menores.

La detención del vehículo se produjo el jueves al mediodía cuando una patrulla que hacía una ronda por la urbanización Quint Mar detectó un vehículo de la marca Mini con matrícula de Lituania avanzando por una de las calles de la urbanización. El coche circulaba de manera reglamentaria pero a los policías les llamó la atención la baja estatura del conductor. “Tenía dificultades incluso para ver por encima del volante”, apuntan fuentes de la policía local. Al detener el vehículo los agentes comprobaron que era un niño quien manejaba el volante y descubrieron que, en una sillita colocada en el asiento trasero, iba un bebé de solo tres meses de edad. En el lugar del copiloto se sentaba una mujer de 40 años que se presentó como la madre de los dos críos.

Los policías identificaron a la mujer y observaron que consta como residente en Sitges. En concreto, su domicilio se halla a unos dos kilómetros del lugar donde se interceptó el vehículo. La mujer no presentaba síntomas de haber tomado drogas ni bebidas alcohólicas y se le pidió que tomara ella el mando del vehículo y que siguiera al coche patrulla hasta la dependencias de la policía local. Este viernes se han completado las diligencias que la imputan, como cooperadora necesaria, en un delito contra la seguridad del tráfico.