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El virus se extiende en las residencias mientras la vacuna todavía va lenta

Los pacientes de covid-19 en las UCI catalanas ya son 408

Los sanitarios hacen cola para recibir la vacuna contra la covid-19 en el Hospital Vall d'Hebron.
Los sanitarios hacen cola para recibir la vacuna contra la covid-19 en el Hospital Vall d'Hebron.MASSIMILIANO MINOCRI (EL PAÍS)
Josep Catà Figuls

La pandemia de coronavirus sigue avanzando en Cataluña. La situación ya impacta en los hospitales, que sufren una alta presión asistencial, y también en las residencias: el 20% de los centros de mayores tiene casos de covid-19. Mientras, la campaña de vacunación sigue con retraso: desde el pasado 27 de diciembre se ha vacunado en Cataluña a 10.475 personas, apenas un 9% de las dosis de las que dispone el departamento de Salud de la Generalitat.

Las residencias de mayores no son ajenas a la situación epidemiológica. Actualmente hay 81 centros (el 7% de los 1.045 que hay en Cataluña) que están en un estado grave por coronavirus, seis centros más que en diciembre. Otros 136 (el 13% del total) tienen brotes pero están controlados, y el resto, 828 residencias, están libres de virus. Con el aumento de casos, todas las expectativas están puestas en la vacuna.

Pero el proceso va al ralentí. Cada semana, a Cataluña llegan 60.000 vacunas (de las cuales el objetivo es administrar la mitad, y la otra mitad guardarla para poner la segunda dosis que necesita cada paciente al cabo de 21 días). La Generalitat ya ha recibido dos remesas pero los problemas logísticos —primero por un problema de Pfizer, y luego por la falta de neveras para transportar las dosis— y de organización han hecho imposible cumplir con las expectativas: desde el inicio de la campaña se han puesto 10.475 vacunas, el 9% de las 120.000 que hasta ahora Cataluña ha recibido.

El lunes, cuando, según el departamento de Salud, ya deberían haberse solventado todos los contratiempos, se inocularon 2.189 vacunas, según ha informado este martes. El objetivo del Govern es llegar a vacunar a 748.000 personas (usuarios y trabajadores de residencias, personal sanitario y personas dependientes) hasta abril, a un ritmo de unas 30.000 vacunas de media a la semana (las otras 30.000 se guardan para la segunda dosis), lo que significa que cada día se deberían poner unas 4.300. El Govern confía en recuperar el tiempo perdido. Cuenta con 26 puntos de distribución y 250 neveras de transporte para esta primera fase, en la que se vacuna a usuarios y trabajadores de residencias. También se está vacunando al personal sanitario desde los propios centros y hospitales.

Para las residencias, el Govern necesita unas 500 enfermeras que, además de su empleo, hagan horas extra para vacunar. Unas 6.000 profesionales se han inscrito para ello, pero los problemas organizativos del Govern para cuadrar los turnos hicieron que la semana pasada solo 200 estuvieran vacunando efectivamente. El departamento de Salud no detalla cuántas están vacunando esta semana.

Las profesionales dan por hecho que se retomará el ritmo. “Por falta de enfermeras no será, porque hay muchas inscritas, no hemos fallado nosotras”, dice Alba Brugués, presidenta de la Asociación de Enfermería Familiar y Comunitaria de Cataluña. “Lo que no se ha hecho podrá recuperarse fácilmente”, añade. “Quizá se fue poco realista, pero son errores que pueden solucionarse. El problema es logístico, porque las enfermeras, por nuestras condiciones laborales, estamos muy acostumbradas a trabajar en muchos sitios distintos”, señala la presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Barcelona, Paola Galbany.

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Aumenta la propagación del virus

En las últimas 24 horas el departamento de Salud de la Generalitat ha notificado 3.751 nuevos casos de covid-19 y 97 muertes. La velocidad de transmisión del virus, la Rt, ha aumentado de 1,27 a 1,45 en un día, es decir, que actualmente cada 100 positivos contagian de media a 145 personas. La propagación del virus tiene ya un fuerte impacto en los hospitales catalanes: este martes hay 2.089 pacientes de covid-19 ingresados, cinco más que ayer, y 408 están en las UCI, 16 más que ayer. La evolución negativa de la pandemia explica que el lunes el Govern decidiese endurecer las medidas restrictivas y confinar perimetralmente todos los municipios catalanes, aunque estarán vigentes a partir del jueves 7 de enero.

Los datos epidemiológicos de este martes son negativos, y confirman una tendencia que el secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, calificó el lunes de “crecimiento sostenido”, un aumento de la propagación del virus que en Cataluña, así como en otras comunidades autónomas y países de alrededor, se experimenta desde principios de diciembre. La cifra de nuevos contagios de este martes es casi el triple que el día anterior, lo que se debe al efecto del fin de semana, ya que los sospechosos de tener coronavirus se esperan a empezar la semana para ir al médico. Los fallecidos notificados, 97, son también el triple que el lunes.

Los indicadores que miden la propagación del virus también señalan que la pandemia está avanzando sin freno. La Rt está a 1,45 y el riesgo de rebrote, que mide el crecimiento potencial de la pandemia, se sitúa en los 552 puntos (a partir de 100 se considera un riesgo alto). La incidencia acumulada en los últimos 14 días roza los 400 casos por cada 100.000 habitantes. Un indicador que muestra el rápido avance del virus es la positividad obtenida en las pruebas diagnósticas PCR y antígenos que se realizan cada día. Actualmente el porcentaje de positividad es del 9,55% sobre un total de casi 112.000 PCR y 87.400 antígenos realizados en la última semana. En la semana anterior a Navidad, la positividad era del 5,79%.

Todo ello está ejerciendo una fuerte presión en el sistema sanitario y hospitalario. Hay 2.089 pacientes ingresados por covid-19, y 408 en la uci. En los últimos 15 días los ingresos hospitalarios han aumentado un 27%, y en la UCI un 20%. El departamento de Salud considera que el sistema sanitario puede trabajar con una presión aceptable de 1.000 contagios diarios (ahora la cifra está cerca de los 2.500).

Sobre la firma

Josep Catà Figuls
Es redactor de Economía en EL PAÍS. Cubre información sobre empresas, relaciones laborales y desigualdades. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona. Licenciado en Filología por la Universidad de Barcelona y Máster de Periodismo UAM - El País.

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