ERC y Junts se enrocan pese a los llamamientos de unidad de la ANC

En la resaca de la Diada, los partidos independentistas surfearon este sábado las críticas vertidas el pasado viernes por la ANC y Òmnium, sobre la lucha partidista entre Junts y ERC y la falta de unidad. En las filas republicanas insisten en que ya tienen por escrito su propuesta y creen que el primer paso de esa voluntad para rehacer puentes sería pactar la respuesta a la inhabilitación de Quim Torra. En Junts ven contradictorio pedir unidad y elecciones a la vez.

El acto central del día nacional de Cataluña, organizado por las dos entidades independentistas, fue un varapalo para los socios del Govern. Si bien en otras ocasiones desde ese mismo atril se les había pedido trabajar en la unidad de acción, el mensaje del pasado viernes fue mucho más contundente. "Sit and talk (siéntese y hablen)”, sintetizó la presidenta de la Assemblea, Elisenda Paluzie, parafraseando el lema con el que el independentismo invitaba al diálogo político sobre Cataluña con el Gobierno y en el ámbito internacional.

Esquerra recogió el guante y su coordinador nacional, Pere Aragonès, ha asegurado este sábado desde Manresa (Barcelona) que compartía la crítica de las entidades y puso como primer hito para recuperar esa unidad de acción que ambos socios del Govern pacten cuál será la respuesta a una posible inhabilitación de Torra. “Lo que no nos perdonaríamos nosotros ni nos perdonaría la ciudadanía sería que, ante una agresión de esta magnitud, el independentismo la acabara gestionando desde los reproches”, ha defendido el también vicepresident.

El Tribunal Supremo revisará el próximo jueves el recurso de Torra contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que le condena a una pena de inhabilitación por desobedecer en marzo de 2019 a la Junta Electoral Central y no retirar la pancarta a favor de los políticos presos de la fachada de la Generalitat durante periodo electoral. El president aceptó que había desobedecido por lo cual la ratificación de la condena se da por hecha. Junts per Catalunya rechaza esa vía de los hechos consumados y se niega a pactar con ERC cuáles serían los pasos a seguir, pues consideran que es una decisión del Torra."Es incoherente pedir unidad y elecciones al mismo tiempo", aseguró ayer la portavoz de Junts, Elsa Artadi.

Tanto los republicanos como la oposición piden al jefe del Govern convoque elecciones lo más rápido posible. ERC quiere que sea antes de que el Supremo se pronuncie (algo que tampoco se sabe cuándo sucederá pero que se prevé tarde mucho) y Aragonès ha abogado por reducir el tiempo de “interinidad” lo más posible. Él tendría que asumir el timón del Govern aunque sin todas las competencias. En ERC temen, además, que Junts use esa situación para desgastarles electoralmente. Una vez Torra sea inhabilitado, el Parlament tiene su propio mecanismo para buscar un sustituto y, si no hay candidato, disolverse. Torra ha pedido ya que no se le busque reemplazo.

“La unidad se acuerda. Ni se exige ni se hace con chantaje público”, ha agregado Artadi. La portavoz, que participó ayer en un acto en el barrio barcelonés de Nou Barris, cree que las peticiones de unidad que hace ERC deberían ser “para todos los temas” y ha recordado que las decisiones “unilaterales” de los republicanos en Madrid, como la investidura o la puesta en marcha de la mesa de diálogo, afectan a todo el independentismo. “La respuesta a la posible inhabilitación sí se está hablando de manera interna”, ha defendido Artadi.

En Manresa, Aragonès ha participado en la presentación del último libro de Oriol Junqueras y Marta Rovira (huida de la justicia en Suiza) y que los republicanos entienden pone sobre blanco sobre negro su propuesta de cara a lograr la independencia. Eso pasa por hacer aumentar el apoyo a esa opción, especialmente en el área metropolitana de Barcelona, de cara a superar el 50% del umbral de voto a favor de la secesión.