Teatro, danza y música suben a las azoteas con la puesta de sol

La cultura, ahora sí, vuelve a subir a los terrados de Barcelona i de L’Hospitalet, de la mano de Coincidències, que este jueves inaugura en el Guinardó con la obra Les coses excepcionals, de Pau Roca, la octava edición de Terrats en cultura, una serie de conciertos, teatro y danza que se celebran en azoteas. “Cuando a finales de abril, en pleno confinamiento, el Ayuntamiento de Barcelona anunció que organizaría, con Mediapro una serie de conciertos desde balcones y azoteas nos sentó muy mal”, comenta Pol Noya, de Coincidències. “No porque no lo hiciérmaos nosotros, sino porque el Consistorio, que apuesta por el asociacionismo, por la creación comunitaria, por construir a partir de la sociedad… no contara con la cultura de base”. El polémico concierto no se celebró por la oposición a participar de la mayoría de implicados por el coste del evento.

“No somos los únicos que hacemos este tipo de eventos, pero llevamos desde 2013 con la iniciativa…”, remarca Noya, que recuerda que han obtenido varios premios, entre ellos, el Butaca a la mejor iniciativa para público de 2019. “Nuestra idea es que los terrados, olvidados a causa de la gentrificación, vuelvan a ser un espacio de vida. Y durante la pandemia la gente, de alguna manera, lo ha redescubierto en toda Barcelona”.

La edición de este año, que tendrá cinco espacios (el espectador sabrá dónde es cada actuación solo 48 horas antes), consta de seis eventos. La crisis sanitaria les ha ido pisando los talones: “Tenemos la convocatoria abierta en septiembre, porque, como cada año, Cultura als terrats iba a ser en abril”, explica el responsable de la organización. “En febrero ya habíamos concretado todo y hubo el parón. Han sido cuatro meses de cambios constantes y al final, pensando que en agosto Barcelona es un páramo cultural y que precisamente este año mucha gente no iba a tener vacaciones o se iban a quedar en la ciudad, pues optamos por estas fechas”.

El hecho de ser funciones en pequeño formato y al aire libre ha ayudado a la adaptación a los protocolos de seguridad sanitaria. Se ha reducido convenientemente el aforo de manera que, de media, habrá entre 40 y 60 personas en cada espectáculo. El acceso del público será escalonado, la mascarilla, obligatoria y habrá geles hidroalcohólicos para desinfectarse.

Cada jueves de agosto, con la puesta de sol (“ese es nuestro horario”, dice Noya), habrá espectáculo en los terrados de Barcelona: el 6 (y, excepcionalmente) el viernes 7, Les coses excepcionals; el 13, el humor y la música de Xavi Lozano, en Les tres torres; el 20, la danza Roges, de Miquel Barcelona, en Les Corts, sobre la posguerra; y el 27, en La Pau, tendremos a Marta Knight.

El 18 de septiembre, en L’Hospitalet, noche de tango con Sabdra Rehder y Elbi Olalla; el 19, el espectáculos de flamenco Y después qué, de Belén Moya y Fernando López. También en L’Hospitalet, el 8 de octubre, cantrará el italiano Alessio Arena y cerrarán, el 9, Joan Vázquez y Marc Sambola con Coplas por Ocaña.