Barcelona cede espacio a bicis y autobuses en la calle de Aragó y la Diagonal a costa del coche
Colau anuncia un carril bici en la autopista urbana y la eliminación de carriles para vehículos en arterias como Gran Via para mejorar la red de buses y combatir la contaminación
Con el tráfico recuperándose a toda velocidad y la contaminación subiendo también hasta acercarse a los niveles prepandemia, Barcelona ha decidido mantener buena parte de las actuaciones urbanísticas emprendidas durante la crisis del coronavirus para facilitar los trayectos a pie, en bicicleta y transporte público. Además, acelerará nuevas intervenciones, como la eliminación de carriles en tramos de la Diagonal o la Gran Via para mejorar la eficiencia de la red de autobuses, o la que mayor carga simbólica tendrá: habilitar un carril bici en la calle de Aragó, una de las arterias principales, con seis carriles, que cruza la ciudad y concentra tráfico, contaminación y ruido. El carril se ubicará en el lado mar y se segregará del tráfico con otro carril de aparcamiento y servicios (contenedores). La idea es que esté operativo en octubre.
El paquete también incluye carril bici en el paseo de la Zona Franca, una intervención de la que se habla desde hace años pero no se materializa. En las mejoras, notables, en carriles bus destaca la ampliación de los carriles bus en la Diagonal, entre Francesc Macià y Aragó, una actuación que prevé eliminar un carril en sentido Besòs. Sumada esta novedad al corte de tráfico en los laterales, en este tramo y en dirección Besòs habrá un solo carril para los coches. En la salida de la ciudad por la Zona Universitaria también se creará un nuevo carril bus de entrada en la avenida de Esplugues (a costa de los coches) y un segundo carril bus de salida desde la plaza de Pius XII. También en la Gran Via entre paseo de Gràcia y Marina se habilitará un segundo carril bus, y también a costa del coche.
La alcaldesa Ada Colau ha comparecido este jueves para anunciar que las medidas tomadas durante la pandemia “no tienen marcha atrás”. “Hemos de ganar espacio para la vida, no queremos volver a la normalidad de la contaminación en ningún caso”, ha remachado. A su lado, la teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz, ha recordado que son actuaciones que responden a la “escucha a los vecinos” y que la experiencia ha demostrado que “funcionan” y que la ciudadanía las utiliza.
Respecto a la habilitación de zonas de paseo, se ampliarán nuevas aceras (calle de Pelai y Ronda Universitat) y se mantendrán buena parte de los cortes de calles realizados durante la pandemia (laterales de Gran Via o Diagonal). En el caso de la Via Laietana, el corte de los fines de semana se aplazará hasta las tres de la tarde del sábado para no interferir con la actividad del mercado de Santa Caterina. Las vías secundarias que se cortan de día pasarán de las 60 que llevan cortadas desde mayo a la mitad, 34. Sobre las arterias que se han cortado en fin de semana (como el paseo de Sant Joan, Pi i Margall, o Sants-Creu Coberta), se mantendrán los fines de semana; Gran de Gràcia y Fabra i Puig, un fin de semana al mes, y Aragó, un domingo al trimestre.
También está prevista una prueba piloto, minúscula pero simbólica, al levantar 17 metros cuadrados de asfalto en la confluencia entre las calles de Rocafort y Consell de Cent, que se está pacificando. Una actuación en línea con la supercruïlla del mercado de Sant Antoni. La inversión total prevista es de 2,2 millones de euros.
Las entidades que defienden medidas drásticas contra la contaminación y para hacer la ciudad más habitable no han tardado ni un segundo a valorar el anuncio. Tampoco la patronal catalana de la automoción Fecavem, que ha tachado el anuncio de “incongruente” por fomentar al mismo tiempo el coche privado en el turismo.
Desde Eixample Respira, una plataforma vecinal que pide reducir la contaminación en el centro de la ciudad, han celebrado el carril bici de Aragó como “una victoria simbólica por lo que representa la calle, pero debe ir acompañada de medidas para reducir el tráfico en toda la ciudad”, ha afirmado su portavoz, Guille López. “Celebramos también la ampliación de carriles bus en la Diagonal, con la reducción de carriles de coche que supone. Pero lamentamos que el programa Obrim Carrers, que cortaba Aragó un domingo al mes, pase a ser trimestral. ¿Por qué se revierten medidas que funcionan?”, ha preguntado.
Por parte del BACC, el Bicicleta Club de Catalunya, Carles Benito ha venido a decir que bienvenido sea el carril de Aragó, pero que la ciudad necesita buenas conexiones en la red existente. “El carril bici de Aragó es fantástico a nivel simbólico, pero está en una zona donde ya hay oferta de carriles. Lo necesario es resolver las conexiones y enlaces en la red existente”, ha afirmado. Sobre el carril de Zona Franca, Benito, ha admitido que es “importante porque no hay en toda la zona”, pero pidió conectarlo con la plaza de Cerdà. “Si no, estaremos en las mismas”, ha dicho.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.