‘Influencers’ y blogueros: la Andalucía más real se descubre en el móvil
La pujanza de perfiles viajeros en redes sociales es una herramienta para dar a conocer destinos porque el contenido llega de manera más directa y fiable a la audiencia
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La primera hija de Claudia Robles y Claudio Martín llegó con un blog bajo el brazo. La iniciativa nació como ella, en 2017, y fue bautizada Viajando con Manuela en honor al nombre de la pequeña. Fue un pasatiempo para una pareja que no quería dejar de recorrer mundo tras la llegada de su bebé. Aquel diario llamó la atención. Había muchas personas interesadas en ver cómo era eso de subir a una autocaravana con niños para recorrer el mundo. Siete años y 50.000 seguidores después, son una de las familias más conocidas de las redes y, desde su residencia en Benalmádena (Málaga, 73.160 habitantes), tienen a Andalucía entre sus destinos más visitados. Y se han convertido, como otros muchos influenciadores y blogueros, en una fórmula para que muchos destinos atraigan visitantes. “Estos perfiles son una herramienta muy eficaz”, subraya Franciso Rejón, miembro de la cátedra de Comercio y Transformación digital del Instituto de Investigación e Innovación en Turismo (IATUR) y la Universidad de Málaga.
El ejemplo de Viajando con Manuela no es único. Son muchas las personas que de manera individual, en pareja o familia se han lanzado a crear blogs asociados a numerosas redes sociales para dar a conocer sus escapadas. Fotos, vídeos y artículos permiten conocer sus visitas, qué comen, dónde duermen, las actividades que realizan, sus opiniones. Es justo lo que busca la audiencia, la cercanía, “porque termina considerándolo como si fuera una recomendación de alguien cercano, de un amigo”, dice Rejón. Y se han convertido, así, en un instrumento útil para muchos municipios. “Estas personas dan a conocer sus experiencias de forma auténtica y la gente se queda con eso”, añade Julia Álvarez de Toledo, de Turismo Costa del Sol, que subraya que organizar viajes de influencers, al igual que se realizan viajes de prensa, es una herramienta “muy rentable”. Los blogueros se convierten así en nuevas formas de promoción, sustituyendo a la publicidad más tradicional u otras acciones de marketing. “Es, además, un contenido muy orgánico. No se esperan grandes producciones, solo vídeos que estén editados con el propio móvil. Y con muy pocos recursos se puede conseguir muchísimo impacto, sobre todo cuando algo se viraliza”, añade Adrián Gómez, director de Innovación en Turismo Andaluz.
“Nosotros estamos constantemente publicando contenido mientras hacemos los viajes. Aportamos mucha visibilidad y conseguimos un gran alcance: muchos de nuestros eventos se convierten en ‘trending topic”, confirma Karmen Salas, presidenta de la asociación Andalucía Travel Bloggers, que cuenta con una treintena de socios y socias con perfiles muy variados. La entidad nació en 2018 con el objetivo de promocionar los destinos andaluces, difundir sus experiencias y servir de estímulo para otros viajeros. Oficinas de turismo, ayuntamientos, técnicos, responsables de organismos comarcales o empresas privadas contactan con ellos para ofrecerles viajes y rutas. Salas traslada la propuesta a un grupo de Whatsapp en el que están todos los asociados y, quien quiere y puede, se apunta. Luego, durante el viaje, cada cual hace su trabajo: publican numerosas fotos y vídeos en sus redes sociales y se comprometen a hacer, mínimo, un reel en Instagram y un artículo en su blog. No pagan alojamiento o comida, pero tampoco cobran. “Lo hacemos porque nos gusta conocer sitios, viajar, que nos expliquen todo. Y, a cambio, conseguimos que los destinos lleguen a miles de personas”, relata Salas, que tiene su propio canal, Un mundo alrededor, con 61.000 seguidores en Instagram.
Su perfil, como el de otros muchos blogueros, da envidia. Qué ver un día en Salobreña (Granada), el área de autocaravanas de El Coronil (Sevilla), una ruta por la Axarquía malagueña o los pueblos más bonitos de La Alpujarra granadina son algunos de sus últimos contenidos. También un viaje a Priego de Córdoba, iniciativa que surgió del propio municipio para invitar a otros miembros de Andalucía Travel Bloggers. Allí estaban también Claudia y Claudio con su autocaravana. “Andalucía es una comunidad muy viva, tiene de todo y para gente muy variada”, explica la pareja, que en sus últimas entradas promociona la Vía Verde del Aceite o municipios como Cumbres Mayores (Huelva). “Hoy la publicidad tradicional funciona menos. En nuestras entradas la gente te ve en los sitios, dónde vas, los restaurantes que visitas, los planes que haces… Es todo mucho más práctico. Y se fían más de ti porque es todo más real”, relata Robles, enamorada de Cabo de Gata (Almería), las playas de Cádiz y los pueblos blancos del interior de Málaga. Acaba de ganar el Influencer Award Spain en el sector de viajes.
Recomendaciones “de verdad”

“Nosotros vamos, probamos los sitios y recomendamos lo que de verdad nos ha gustado más. Y eso funciona muy bien”, añade Verónica Santamaría, de 40 años, que junto a Juan Sánchez, de 41, cuenta sus viajes en Un destino entre mis manos, proyecto que nació en 2016 desde su lugar de residencia, Cádiz. “Cada vez que tenemos un fin de semana libre buscamos una escapada y, claro, por cercanía, acabamos en Andalucía. Aquí hay de todo: no hay vida para visitar todos los sitios que nos gustaría”, asegura Santamaría, que coincide con otros muchos influenciadores en que, aunque siguen viajando a miles de kilómetros, reconocen que la comunidad andaluza tiene algo especial. “Vamos lejos, sí, pero a nosotros nos siguen sorprendiendo muchas cosas de cercanía. Ahora estamos alucinados con todo lo que ofrece Málaga. La gente viene por el sol y la playa, pero hay mil sitios más increíbles y desconocidos”, añade Lucía Salmerón, de 42 años, que junto a su pareja Michael Kelly, de 46, sus hijas África y Zoe, de cuatro y siete, y su perra Pinta impulsan Bloguera viajera.
Fue un proyecto que ella arrancó en 2021 cuando su rodilla hizo crac. Estaba saltando en una cama elástica con sus hijas y se rompió el ligamento cruzado. Vivió cuatro operaciones. Su vida se paró. Pero nunca dejó de viajar gracias a su blog, que nació como vía de escape hasta que fue tomando un cariz más profesional. “Nos dimos cuenta de que todo lo que contábamos en familia tenía muchas visitas, así que nos hemos enfocado en ese nicho”, relatan quienes residen desde hace 13 años en Benalmádena. “Viajamos fuera, pero últimamente hacemos más turismo de cercanía: desde la Sierra de las Nieves al geoparque de Granada o La Línea de la Concepción”, añade Salmerón, que aprovecha para animar a cualquiera a recorrer la geografía andaluza y, por qué no, lo comparta en sus redes sociales.
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