Una mujer fallece y otra sale ilesa tras precipitarse el coche en el que viajaban a un río de Gandía

Una mujer ha fallecido la tarde de este jueves al caer el coche en el que viajaba, junto con otra persona, al cauce del río Serpis, en Gandía (Valencia), desde una altura de unos 20 metros. La segunda ocupante, que era la conductora, logró salir con vida del vehículo y ha quedado detenida por homicidio imprudente y por un delito contra la seguridad vial al dar positivo en alcohol y drogas. Ambas eran personas extranjeras.

El incidente ocurrió sobre las 20.00 de este jueves y poco después el Consorcio de Bomberos de Valencia recibió la alerta de que un coche había caído a las aguas del río Serpis, en una zona muy cercana al puerto de Gandía, y que en su interior había dos personas. Hasta el lugar acudieron tres dotaciones de bomberos de los municipios de Gandía y Oliva, el sargento de Gandía y el oficial del Consorcio del Puerto de Gandía.

A la llegada de los efectivos, la conductora ya estaba fuera del agua y estaba ilesa. Según relata la Cadena SER cuatro jóvenes que andaban por la zona vieron pasar el vehículo a gran velocidad y se lanzaron al agua para rescatar a las víctimas.

El equipo Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil se hizo cargo de la búsqueda de la otra ocupante, cuyo cuerpo fue rescatado horas después, ya sin vida. La unidad del SAMU que se trasladó al lugar no tuvo que intervenir debido a que la pasajera ya había fallecido y a que la conductora no presentaba ningún daño.

La sobreviviente es una mujer de 20 años y de nacionalidad brasileña, que ha dado positivo en el test de alcohol y drogas, en concreto, cocaína. La Guardia Civil ha comprobado que no tenía tampoco el permiso de conducir homologado en España. Por todas estas circunstancias, ha quedado detenida como presunta autora de un delito de homicidio imprudente y contra la seguridad vial. La Guardia civil ya se hace cargo de la investigación para esclarecer cómo sucedieron los hechos.

Testigos del suceso aseguraron a la SER que el vehículo se encontraba estacionado en el aparcamiento situado tras la iglesia de Sant Nicolau y que las jóvenes estaban en evidente estado de embriaguez cuando se subieron al coche. Nada más arrancar, salieron disparadas y recorrieron unos nueve metros antes de caer en el agua.