Sánchez: “En las elecciones de 2027 este acoso al Gobierno se volverá contra los acosadores”
Feijóo cree que la legislatura está agotada aunque coincide con el presidente del Gobierno en que habrá Presupuestos
Pedro Sánchez admite que el Gobierno está sufriendo un momento delicado por la presión de las últimas decisiones judiciales y del escándalo del caso Koldo, pero está convencido de que los ciudadanos progresistas son conscientes de que la mayor parte de lo que él define como un “acoso al Gobierno” es una estrategia para intentar derribarlo. Sánchez sostiene que eso se volverá en contra de quienes la están llevando a cabo. En una charla informal con periodistas en el Congreso el día de la Constitución, el presidente ha denunciado que el Gobierno está sufriendo “un acoso por tierra, mar y aire, en el ámbito político, mediático y judicial” pero está convencido de que cuando llegue el momento de la verdad, esto es cuando se vuelvan a abrir las urnas, “ese acoso se volverá contra los acosadores”. El líder socialista cree que el Gobierno de coalición está sufriendo un acoso similar al de otros Ejecutivos progresistas en todo el mundo, pero está convencido de que en España no funcionará porque la ciudadanía se movilizará contra él.
Sánchez defiende que igual que en 2023 hubo una gran movilización de la izquierda frente a la posibilidad de que gobernara el PP con Vox, esta “fuerte conexión del electorado progresista con el Gobierno” volverá a aparecer y se volverá como un bumerán contra los que, según su visión, están acosando ahora al Gobierno. El presidente también ha contestado a la idea de Yolanda Díaz de que el Gobierno está en resistir y no tanto en transformar. “Yo no estoy a resistir. Yo estoy avanzando”, ha insistido. Sánchez asegura que no le preocupan las denuncias de Víctor de Aldama, porque el suyo es “un Gobierno limpio”, y confía también en sacar los Presupuestos en los primeros meses de 2025, lo que consolidaría la legislatura. En este sentido, el ministro de Transportes, Óscar Puente, que ya tiene a su equipo analizando las denuncias de Aldama sobre supuestos amaños en contratos de obra pública, señaló a La Sexta que en una primera mirada ya han visto cosas que demuestran que lo que dice el empresario “no tiene ni pies ni cabeza”, aunque el informe definitivo estará la próxima semana.
El presidente insiste en todo momento en que su Ejecutivo está tranquilo y preparado para soportar la presión que sea necesaria porque cree contar con un fuerte apoyo popular y una gran “conexión y empatía” por parte del mundo progresista que se movilizó en 2023 y que permitió, con un resultado mucho mejor del esperado, que él siga en La Moncloa. “No nos van a quebrar”, ha insistido Sánchez, convencido de que agotará la legislatura y toda esta presión mediática y judicial será inútil.
“Este acoso genera mucho ruido, pero el tiempo pondrá las cosas en su sitio. Somos un Gobierno limpio y enfrente tenemos una oposición que ha abandonado el debate legítimo de ideas y ha optado por la destrucción. Pero esta estrategia del acoso está condenada al fracaso. “No tenemos una oposición política, es de otro tipo”, insiste el presidente, que se presenta ante la prensa tranquilo, y convencido de que esa conexión de los progresistas con el Gobierno de la que habla será más fuerte que toda la presión de la oposición. Sánchez cree que ahora la ciudadanía progresista está en otras cosas, porque no hay elecciones a la vista, pero cuando llegue el momento se activará. Además, Sánchez insiste en que Alberto Núñez Feijóo se está desgastando, y ya es el líder con menos apoyo entre sus propios votantes, mientras sostiene que el PSOE sigue siendo prácticamente el único partido socialdemócrata europeo por encima del 30% de intención de voto.
Mientras, en otra conversación con la prensa en el mismo acto, a pocos metros del presidente, aunque no se saludaron en ningún momento, Feijóo aseguró que ve la legislatura está agotada por la agenda judicial en torno al Ejecutivo, que advierte de que está en su fase inicial. El líder del PP concede total credibilidad a las acusaciones del empresario Aldama, con el argumento de que la Fiscalía Anticorrupción da verosimilitud a su testimonio porque le ha excarcelado tras colaborar. El PP está decidido a mantener la ofensiva contra el PSOE por los casos de corrupción que le afectan y, en ese sentido, según ha confirmado Feijóo, está estudiando llamar a Aldama a comparecer en el Senado, aunque no antes de que acabe el año. En conversación informal con periodistas, el líder del PP ha defendido que él no tiene prisa por echar a Sánchez, y que los problemas no los tiene él, sino el Gobierno. “La ansiedad habita en La Moncloa. Yo no tengo que ir a ningún juzgado ni preocuparme cada día por la agenda judicial”, ha defendido Feijóo. “Esto ya no da más de sí”, ha remachado sobre la legislatura.
Pese a dar la legislatura por agotada, el líder del PP contempla la posibilidad de que el Gobierno saque adelante los Presupuestos generales, en función de las concesiones que Sánchez haga a los partidos independentistas. “Depende de lo que le dé a Junts”. Feijóo es consciente de que en estos momentos los socios parlamentarios de Sánchez siguen sosteniéndole, pero afirma que “no tira la toalla” con el PNV, aunque reconoce que no ha habido ningún acercamiento con el partido vasco en los últimos tiempos. A los socios de Sánchez los bautiza como “fijos discontinuos”. El ambiente en este día de la Constitución era así el de un Gobierno que está trabajando para cerrar los Presupuestos y consolidar la legislatura, pero siempre con el ojo puesto en los juzgados, de donde llegan malas noticias constantes para el Ejecutivo, mientras la oposición está concentrada en esa agenda judicial convencida de que desgastará definitivamente a Sánchez.
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