Los 650 cascos azules españoles en Líbano suspenden las patrullas y reducen al mínimo su actividad

Los más de 650 ‘cascos azules’ españoles desplegados en el sur de, Líbano han suspendido todas las patrullas y reducido su actividad a lo “absolutamente indispensable”, según ha informado este lunes la ministra de Defensa, Margarita Robles. En unas breves declaraciones a la prensa, la ministra ha explicado que a primera hora de tarde de hoy los militares españoles estaban refugiados en los búnkeres subterráneos de sus bases y destacamentos, tras haber sido avisados por el Ejército israelí de una nueva oleada de bombardeos.

Aunque la FINUL (Fuerza Interina de Naciones Unidas para la Líbano), que se encarga de vigilar la línea de separación entre Líbano e Israel, ha reducido al mínimo su actividad desde la semana pasada, cuando se produjo la explosión en cadena de cientos de buscas y walkie-talkies con los que se comunicaban los responsables de Hezbolá, dejando un reguero de miles de muertos y heridos, Robles ha asegurado que los soldados españoles se encuentran “con la moral alta” y no han sufrido ninguna baja. No obstante, ha reconocido que “la situación es absolutamente preocupante, dramática” y que la buena relación que mantienen con la población local no es ninguna garantía. “Nadie está a salvo”, ha apostillado. Hoy mismo ha hablado con el general de división Aroldo Lázaro, comandante en jefe de los 10.000 soldados de la ONU en Líbano, y con el general de brigada García del Barrio, al frente del contingente español, como hace casi cada día, según ha subrayado.

De momento, España no se plantea la evacuación de sus tropas en Líbano, una decisión que en todo caso correspondería tomar a Naciones Unidas. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, tiene previsto reunirse esta semana en Nueva York con Jean-Pierre Lacroix, secretario general adjunto de Operaciones de Paz de la ONU, de quien depende la FINUL.

Hasta ahora, las instrucciones que tienen los cascos azules son las de mantener sus posiciones sobre el terreno para recuperar la actividad tan pronto como cese la actual escalada bélica. No obstante, tanto la ONU como España tienen al día planes de evacuación alternativos por si hubiera que realizar una operación de extracción, que incluso se ha ensayado ya en ejercicios militares.

Evacuación de civiles

Las fuentes consultadas estiman, no obstante, que antes de que se llegue a ese escenario se producirá la evacuación de la población civil. Actualmente residen en Líbano unos 900 españoles, muchos de los cuales tienen doble nacionalidad o están casados con ciudadanos libaneses.

El ministerio de Asuntos Exteriores desaconsejó a primeros de agosto los viajes a Líbano, pero de momento no ha puesto en marcha una operación de evacuación de civiles. Un portavoz de dicho departamento ha subrayado este lunes que “España tiene previsto y preparado el plan de evacuación, que se activará en el caso de que las circunstancias lo exijan”. Fuentes militares aseguran que hay aviones preparados para el momento en que se tome una decisión, pero recuerdan que aún es posible salir del país en vuelo regular.

Exteriores ha actualizado este lunes sus recomendaciones de viaje aconsejando a los españoles abandonar el país en vuelo comercial. “En la situación actual se desaconseja el viaje bajo cualquier circunstancia al Líbano y se recomienda a los españoles que se encuentren en el país, especialmente si su estancia es temporal, que lo abandonen utilizando los medios comerciales existentes”, señala el texto. “Se recomienda permanecer atento a las redes sociales y otros medios de comunicación de la Embajada de España en Beirut”, agrega.