El ministro Bustinduy reclama a las empresas españolas en Israel que tomen medidas para no contribuir al “genocidio”

Sumar redobla la presión para que el Gobierno actúe ante la ofensiva militar de Israel en la franja de Gaza. Más allá del reconocimiento del Estado palestino, que se realizará en las próximas semanas pero que la propia ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha calificado este miércoles de “simbólico”, el socio minoritario del Ejecutivo de coalición abre nuevos frentes para que España se mueva cuanto antes. El titular de Derechos Sociales y Consumo, Pablo Bustinduy, ha advertido en una carta a varias empresas españolas con actividades económicas en Israel sobre el riesgo de colaborar involuntariamente con el “genocidio” en Palestina. En la misiva, según la nota de prensa difundida por su ministerio, se insta a esas compañías a hacer lo necesario para evitar que sus negocios contribuyan a las “vulneraciones de derechos humanos” que, señalan, el Gobierno de Benjamin Netanyahu está cometiendo en los territorios ocupados.

La parte socialista del Gobierno se ha distanciado inmediatamente de esta iniciativa. El Ministerio de Asuntos Exteriores, dirigido por José Manuel Albares, ha remarcado que Israel es un “Estado amigo de España”. “Es la primera noticia que tenemos de esa carta”, han señalado fuentes diplomáticas, quienes se han mostrado sorprendidas de que Bustinduy hable en nombre de “el Gobierno” en un asunto de política exterior. “No sabemos nada de esa carta. Nuestra posición es clara sobre Gaza y Palestina, pero también es clara nuestra posición de que el Estado de Israel y el pueblo de Israel son amigos de España y del pueblo español”, han añadido las mimas fuentes, antes de recordar que este mismo martes, a través de las redes sociales, Albares ha advertido de que la operación militar de Israel en la localidad de Rafah, fronteriza entre la Franja y Egipto, “sitúa a 1′4 millones de civiles palestinos ante un riesgo inaceptable y tiene graves consecuencias para la estabilidad de la región”. El jefe de la diplomacia española ha vuelto a urgir “el alto el fuego inmediato, la liberación de los rehenes y la entrada de ayuda humanitaria ya y sin obstáculos”. Fuentes del Ministerio de Economía, cuyo titular es Carlos Cuerpo, han señalado también que desconocían la existencia de la carta enviada por el responsable de Derechos Sociales a las empresas. El ministerio de Bustinduy rechaza entrar en un marco de enfrentamiento en el Gobierno. “Nuestra carta es clara y nuestro objetivo también. Creemos que la situación en Gaza es insoportable y que todos los actores tienen que hacer todo lo que esté en su mano para poner fin a la vulneración sistemática de derechos humanos”, señalan brevemente fuentes del departamento.

No es la primera vez que los ministros de Sumar chocan con Albares por defender sus propias posiciones en el conflicto palestino-israel´, entrando en un área que el ministro considera reservada a su departamento y al propio presidente del Gobierno. En febrero pasado, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, anunció que planeaba viajar a Cisjordania invitada por su homólogo palestino. Exteriores, que se enteró de la noticia por los medios de comunicación, no ocultó su malestar. “Desde Exteriores no se está preparando ningún viaje de la vicepresidenta segunda”, fue la lacónica respuesta de Albares cuando fue preguntado. El viaje aún no se ha realizado.

También la Embajada de Israel en Madrid ha emitido un comunicado en el que “manifiesta su total rechazo a la acusación difundida por algunos ministros, intelectuales y medios de comunicación de que Israel está cometiendo un genocidio”. Aunque no lo menciona expresamente, Bustinduy utiliza la palabra “genocidio” en su misiva a las empresas. “La demonización y deslegitimación de Israel, acudiendo a acusaciones carentes de fundamento da alas a Hamás y a quienes persiguen la desaparición del Estado de Israel , son una clara incitación al odio y alientan el antisemitismo”, agrega la nota. En contraste, la Embajada israelí reprocha lo que califica de “incomprensible silencio en España de la mayoría de los intelectuales y organizaciones defensoras de los derechos humanos ante el drama de los 132 secuestrados que siguen en manos de los terroristas de Hamás”.

Aunque el Ministerio de Derechos Sociales evita ofrecer datos concretos de las empresas destinatarias de la misiva, fuentes de dicho departamento señalan que se trata de compañías con una “presencia destacada” en Israel y que operan en el sector de la energía, infraestructuras, servicios o logística. Según un reciente estudio de la consultora Informa D&B, en Israel operan al menos 28 empresas españolas, de las que dependen 32 filiales en la zona. Entre ellas están Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) y Naturgy. Inditex, multinacional española de la industria textil, también está presente en el país.

Bustinduy emplaza en su escrito a las empresas a informar de los estudios realizados para evitar los “abusos que pudieran entrañar sus actividades y relaciones empresariales para los derechos humanos” en la zona. Y les insta específicamente a “rendir cuentas” sobre las medidas que están adoptando para “prevenir cualquier consecuencia negativa de su actividad económica” en la situación que se está viviendo en la franja de Gaza y en los territorios palestinos ocupados.

Además, el dirigente de Sumar solicita a las empresas que informen al ministerio sobre los mecanismos y disposiciones que han puesto en marcha, para que los consumidores tengan “pleno conocimiento” de las actuaciones que están llevando a cabo y así “evitar participar directa o indirectamente de las graves violaciones de derechos humanos que está sufriendo el pueblo palestino”, señala.

La carta recuerda que el pasado 26 de enero la Corte Internacional de Justicia ordenó a Israel adoptar medidas “inmediatas y efectivas” para impedir el genocidio en la Franja. La iniciativa es un paso más en la ofensiva de Sumar sobre este asunto. El domingo pasado, la vicepresidenta Yolanda Díaz pidió a Pedro Sánchez en un mitin en Tarragona que reconociera el Estado palestino en el Consejo de Ministros de ayer martes, una reclamación que secundó un día más tarde su portavoz y ministro de Cultura, Ernest Urtasun, pero que fue desoída por la parte socialista del Gobierno.

“Lo importante es que suceda cuanto antes, no solo el reconocimiento”, ha advertido este miércoles en Antena3 Pablo Bustinduy. “El mundo entero está reaccionando”. “El objetivo, [del Gobierno] es conseguir que se hagan el mayor número de cosas posibles y cuanto antes”, ha expresado, dando a entender que con esa declaración de reconocimiento, que Sumar espera se realice pronto, no basta.

La causa de Palestina ha sido una de las banderas históricas del espacio a la izquierda del PSOE e incluso supuso uno de los puntos de fricción a la hora de concretar el acuerdo de gobierno entre los dos partidos. Sin embargo, en los últimos meses, con la evolución de la guerra, el presidente Pedro Sánchez ha apostado abiertamente por reconocer al Estado palestino y está negociando una posición común con otros mandatarios europeos. “Es una cuestión simbólica y también política, que coloca a España del lado de los países que reconocen a Palestina su derecho a existir”, ha afirmado en À Punt Sira Rego. La ministra, que tiene raíces palestinas, ha añadido que la medida ejercería una “mayor presión” sobre la comunidad internacional.

En estos siete meses, Sumar ha presentado varias iniciativas en el Congreso sobre este asunto. Entre otras cuestiones, ha pedido a las instituciones europeas redoblar los esfuerzos diplomáticos para acabar con el conflicto, ha emplazado al Gobierno a suspender el comercio de armas con Israel y ha solicitado la exclusión de este Estado de los próximos Juegos Olímpicos de París.