La Junta de Castilla y León niega el uso de un conservatorio para un concierto solidario por Gaza por su “connotación política”

La Junta de Castilla y León, gobernada por el PP y Vox, ha negado el uso de un conservatorio público en Palencia para celebrar un concierto por la paz y para denunciar la masacre cometida por Israel sobre Gaza. La cita musical estaba prevista para la tarde de este martes 30 de enero, día escolar de la no violencia y la paz, fecha donde los colegios suelen organizar actos solidarios o reivindicativos hacia los conflictos internacionales. Unos colectivos de padres y madres palentinos habían organizado unos conciertos en el conservatorio de la ciudad palentina, pero la Junta, responsable de esos espacios, ha revocado la autorización que otorgó inicialmente. El delegado de la Junta en la provincia de Palencia, José Antonio Rubio, ha justificado la medida porque “no se autorizan actos que tengan connotación política” en un “centro educativo”.

La primera en exponer la decisión de la Junta ha sido la federación provincial de las asociaciones de padres y madres de los centros públicos de Palencia (FAPA). “Nos hemos visto obligados a suspender este evento, ya que la Junta de Castilla y León no autoriza a realizar un evento de estas características en sus instalaciones”, han lamentado en sus redes sociales pese a contar con todo preparado para el concierto, con un pequeño aforo y sin afán de lucro. Los actos con la “connotación política” descrita por el representante del Gobierno autonómico en Palencia consistían en emitir parte de la actuación de la orquesta Filarmónica de Berlín, la lectura de unas poesías sobre la no violencia a cargo de los niños y que otros jóvenes alumnos del conservatorio interpretasen algunas composiciones. El permiso, inicialmente otorgado, se revocó el viernes pasado, motivo que indujo a la suspensión del concierto.

“Es un acto muy peligroso y muy político”, ironiza Satus Jiménez, la presidenta de la FAPA palentina, ante los argumentos de la Junta. En primera instancia, afirma, la dirección del conservatorio de música profesional de Palencia les había dado el permiso para usar sus instalaciones, pero en cuanto se difundió el cartel y se plasmaron las alusiones a Gaza y a Palestina, llegó el rechazo: “Nos llamaron para decirnos que el acto con esas características no podía celebrarse”. Jiménez apunta a órdenes políticas para justificar el cambio de postura de los responsables del conservatorio. Los colectivos trataron de encontrar un lugar para convocar el concierto durante el fin de semana, pero no lo consiguieron, de ahí el empeño en convocar de nuevo la cita para la semana próxima: “Es importante que los centros educativos trabajen para que vean dónde están sufriendo más los jóvenes y niños”. La mujer se sorprende por la posición de la Junta de Castilla y León, sin nadie que les haya contactado para explicarles la medida. “No tiene connotación política ni nada parecido, defendemos la educación pública, la paz y los derechos humanos”, esgrime. “La paz no tiene contendientes, es lo único que puede decir, no tiene ningún sentido. No sé si es la ideología de la Junta o si no han entendido el mensaje”.

El coordinador de Izquierda Unida (IU) en Castilla y León, el palentino Juan Gascón, critica la intervención del Ejecutivo autonómico. “Es bastante llamativo que no se pueda organizar, se han hecho actos y concentraciones en los centros educativos como se hace el 25 de noviembre contra la violencia machista”, se sorprende. La ofensiva de Israel sobre Palestina en represalia por el ataque terrorista de la milicia de Hamás del 7 de octubre se han traducido en más de 25.000 muertes de población civil de Gaza, el 80% mujeres y niños, motivo por el cual las plataformas educativas habían pensado en estos conciertos por la paz con Palestina en el foco. “Es el día escolar por la paz, cuadraba perfectamente”, expone Gascón, que critica lo que entiende como un acto de censura de la Junta.