El Ayuntamiento de València, del PP y Vox, borra un mural de apoyo a Palestina

“Israel genocida, Europa patrocina” y “Palestina lliure, boicot a Israel” eran dos de las frases que se podían leer desde el pasado 2 de diciembre en el muro exterior de la casa de Carlos Marco, en Benimaclet, València. Junto a esas frases, había dibujos de puños, flores, bombas cayendo en casas, y otros lemas como “From the river to the sea, Palestine will be free”. El mural lo había pintado el pasado sábado 2 de diciembre un grupo de artistas de la ciudad como parte de una acción solidaria por el pueblo palestino organizada por el Grup Autogestionat de Boicot, Desinversions i Sancions a Israel del País Valencià (BDS-PV). Ahora la pared exterior de la casa de Carlos Marco es completamente blanca: este miércoles, los trabajadores del bar del que es propietario en la misma calle le avisaron de que había unos operarios del servicio de limpieza del Ayuntamiento, gobernado por PP y Vox, tapando el mural con pintura. Su pareja fue a preguntar. “Los operarios dijeron que el Ayuntamiento había dicho que el dueño de la casa lo quería tapar”, explica el portavoz del BDS Jorge Ramos, que denuncia una acción de “censura” municipal. El Ayuntamiento, por su parte, asegura que resolvía así reclamaciones de cinco vecinos en la aplicación móvil del consistorio.

Pero Carlos Marco asegura que no solo no quería tapar el mural, sino que había promovido que se pintara. “Cuando hicimos la pintada vino la Policía y me pidieron los papeles para comprobar, con el padrón, que esa era mi casa”, relata Marco. Así que el Ayuntamiento, dice, “era conocedor” de que era su propiedad y de que estaba de acuerdo con la intervención en la fachada. A los artistas “les dejaron terminar de pintar”, afirma. La sorpresa fue que este miércoles, “sin venir a cuento, sin ningún tipo de comunicación”, fueron a borrar el mural. “Si he incumplido algo administrativo, que eso habría que verlo, lo que tendrían que haber hecho es ponerse en contacto conmigo y decirme ‘tienes este plazo para borrarlo’, no venir y hacerlo directamente”, denuncia.

Para el portavoz del BDS, Jorge Ramos, el borrado es “insultante”. Asegura que el colectivo ya lo ha puesto en manos de abogados al entender que podría constituir un delito de prevaricación y de daños a la propiedad ajena. Ambos aseguran que no han tenido noticia del Ayuntamiento y que nadie se ha puesto en contacto con ellos, a pesar de sus repetidas denuncias en redes sociales.

Desde el consistorio, por su parte, aseguran que la limpieza se hizo en respuesta a cinco incidencias generadas por vecinos en la App Valencia, donde se gestionan los avisos y peticiones ciudadanas. Según fuentes municipales, ante estas incidencias, el encargado de la contrata de limpieza de pintadas preguntó a la inspectora del distrito. Esta, aseguran, no tenía documentación gráfica sobre el mural, es decir, no sabía que su contenido era en apoyo de Palestina y “actuó como ocurre habitualmente: autorizó la actuación como lo hace diariamente, con las incidencias que tienen la entrada en la App Valencia”. Desde el Ayuntamiento han añadido que esa pared “ya ha sido motivo de grafitis y pintadas anteriores” y ha sido repintada otras veces por parte de la brigada.

De momento, el muro de la casa de Carlos Marco es blanco de nuevo. Por debajo de la pintura, todavía asoma la sombra de las letras “Palestina lliure”.