Vandalizada la casa de Marcelino Camacho, fundador de Comisiones Obreras, en Soria
La vivienda, con un homenaje esculpido al sindicalista, ha recibido tachones negros
La casa natal del fundador del sindicato Comisiones Obreras (CC OO), Marcelino Camacho, ha sido vandalizada en La Rasa, una pequeña localidad de la provincia de Soria. La vivienda cuenta con una placa conmemorativa del histórico sindicalista que, tal y como ha denunciado el actual líder del sindicato, Unai Sordo, ha quedado marcada con tachones negros en el semblante de Camacho y en frases que lo homenajean. Sordo ha defendido la figura antifranquista de Camacho, también exdiputado comunista, y ha tildado de “fascistas” y “cobardes” las pintadas, que incluyen simbología franquista. “No pudisteis con él tras un genocidio y 40 años de represión. Menos vais a poder mancillar la memoria de —este sí— un padre de la democracia española”, ha escrito el secretario general de CC OO en la red social X, antes Twitter.
Se han desplazado a un pequeño pueblo soriano a vandalizar la casa donde nació Marcelino Camacho.
— Unai Sordo (@UnaiSordo) October 15, 2023
No pudisteis con él tras un genocidio y 40 años de represión. Menos vais a poder mancillar la memoria de -este si- un padre de la democracia española.
Fascistas, cobardes. pic.twitter.com/2chRdgRlkk
Marcelino Camacho nació en el pequeño pueblo soriano de La Rasa, dependiente de El Burgo de Osma, en 1918 y murió en Madrid en 2010. Tras su fallecimiento se colocó en su vivienda natal una placa con su rostro y el lema de “Ni nos domaron, ni nos doblaron, ni nos van a domesticar”, que al igual que su semblante han sido vandalizados. Ese lema ha sido utilizado por Izquierda Unida en Castilla y León para denunciar lo acontecido y reivindicar la figura de este soriano de nacimiento.
Muy cerca ha habido inscripciones de “AE” o “1939″, ambas de apología franquista. Camacho tuvo que exiliarse durante la dictadura por su firme posicionamiento contra Francisco Franco y en favor de la Segunda República. Años después, fue amnistiado y regresó a España. A su vuelta, trabajó en la metalurgia y fundó Comisiones Obreras en 1962, motivo por el cual fue juzgado y condenado a mueve años de prisión. Camacho dirigió el sindicato hasta 1987 y también desarrolló una andadura política en el Partido Comunista de España, legalizado en 1977, formación de la que fue parlamentario entre 1977 y 1981. Reconocido antifranquista, recibió en 1988 la Medalla al Mérito Constitucional por su defensa de los valores constitucionales.
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