Revilla alerta de una alianza PP-Vox para gobernar Cantabria: “Es un peligro”

La partida está en el aire en Cantabria. El PRC de Miguel Ángel Revilla se desploma en las encuestas, que coinciden en que el PP puede ganar las elecciones y en que sin Vox no podrá gobernar la región. La Cadena SER y EL PAÍS han celebrado este miércoles un debate electoral con los cinco candidatos a la presidencia de Cantabria. Miguel Ángel Revilla (PRC), María José Sáenz de Buruaga (PP), Pablo Zuloaga (PSOE), Félix Álvarez (CS) y Leticia Díaz (Vox) se han citado en Santander para plantear sus proyectos políticos y tomar el pulso a la región. El PRC y el PSOE, que gobiernan en coalición, han reivindicado su gestión pese a las crisis del covid y la guerra de Ucrania, mientras la oposición ha criticado su gestión y ha reclamado medidas más ambiciosas. Revilla ha cerrado el debate dando por seguro un pacto entre Vox y PP en caso de que la suma de los votos les dé para gobernar: “Será realidad si hay voto suficiente, y eso es un peligro”.

El presidente cántabro ha iniciado el encuentro presumiendo de datos de empleo y los buenos índices de la región en materia de pobreza o bienestar. “Resaltar contra los agoreros que hablan de una situación caótica que hemos salido de la crisis con cierta fuerza”, ha comenzado el dirigente, muy atacado por la oposición en materia fiscal. El PP de María José Sáenz de Buruaga y Vox, con Leticia Díaz, han censurado lo que consideran una alta presión fiscal en la región, mientras Revilla y Zuloaga, actual vicepresidente, incidían en que Cantabria tiene altos tributos para rentas superiores a 100.000 euros anuales, pero no así con familias menos pudientes. La cita ha transcurrido entre dos posturas, las del PRC y PSOE, ensalzando sus datos de empleo y crecimiento pese a la crisis del coronavirus y la guerra de Ucrania; y la oposición, reclamando medidas de reindustrialización o cambios administrativos.

El sector primario, clave en la economía de Cantabria, ha entrado en el debate de la mano de Sáenz de Buruaga, quien ha incidido en que el campo no encuentra relevo generacional y que la histórica industria regional necesita “atraer empresas y ayudar a los autónomos”. “Cierra la industria y los jóvenes se van, corremos el riesgo de ser una tierra de turistas, jubilados y funcionarios”, ha lamentado la candidata del PP. Por su lado, Leticia Díaz ha abundado en una de las obsesiones de la extrema derecha mundial, la Agenda 2030, un proyecto europeo que, según ella, “asfixia” al ámbito rural. Díaz, para quien las medidas contra el calentamiento global son “locuras y delirios climáticos”, ha instado a la supresión de los sindicatos y ha atacado a los planes de Memoria Histórica, tal y como ha hecho el Gobierno de Castilla y León desde que Vox ingresó en la Junta el año pasado.

Félix Álvarez, cuyo partido, Ciudadanos, apunta a la desaparición, se ha mostrado especialmente crítico con la coalición por “colocar a amiguetes”, y ha recordado la reciente investigación sobre presuntas adjudicaciones irregulares para obras públicas. “Tenemos que ser atractivos para que vengan empresas, los políticos no creamos empleo, eso lo crean empresas, pymes y autónomos y hay que adaptar la oferta educativa a empleos de alta cualificación”, ha reivindicado. El choque entre bloques ha conllevado diferencias en materia de vivienda, con el PP censurando la “ley de vivienda de Pedro Sánchez y Podemos”, que ha prometido no aplicar, y ha garantizado bonificaciones y ayudas para el acceso a viviendas, particularmente en lo rural.

El debate ha concluido con los análisis de los candidatos sobre posibles pactos tras el 28-M. La aspirante de Vox ha censurado que el PP se abra a una alianza con el PRC, a quien ha acusado de “clientelismo”. “Nunca vamos a estar al lado de quienes amparan la corrupción y quienes aplican medidas ruinosas de izquierdas”, ha señalado Díaz. Revilla, sobriamente, ha priorizado “sentarse para llegar a acuerdos” y ha ratificado que no se uniría a Vox. Zuloaga se ha definido como garante contra “los recortes de la derecha” y “garantía” para el progreso contra la derecha. Buruaga se ha definido como clara, ha recordado que los sondeos la dan como ganadora y eso la avala para “gobernar en solitario” y ha instado a Revilla a que no se oponga al gobierno de la lista más votada. La alternativa, cree, un “Gobierno Frankenstein” que aúne a PRC, PSOE y Podemos, ausente en la sesión pero quizá llave en la conformación de ejecutivos. El candidato de Ciudadanos ha prometido no dar sus votos a Revilla y le ha pedido al PP que no haga presidente al actual mandatario como contraprestación para no dar poder al PSOE.

El “minuto de oro” ha servido para que Leticia Díaz pida retirar “prejuicios” sobre su formación: “Vox es ilusionante, hay que desterrar las políticas ruinosas de izquierda”. Álvarez (CS) ha aludido al “día de la marmota” contra las promesas electorales no cumplidas y ha alertado de que “un puñado de votos puede ser decisivo” para la próxima legislatura. El candidato socialista Zuloaga ha insistido en que “algunos candidatos buscan culpables y no soluciones” y ha definido a Cantabria como “tierra de oportunidades” y se ha ofrecido “para gobernar contra los recortes del PP y no retroceder”. Sáenz de Buruaga (PP) ha reclamado elegir “entre seguir estancados o empezar a progresar, el cambio no puede esperar” y se ha ofrecido para liderar una “etapa de oportunidades”. Revilla ha cerrado el encuentro solicitando el voto porque “Cantabria está saliendo con fuerza de la crisis, hay proyectos en marcha para cambiar la región [...] me presento con 80 años con más ilusión que nunca” y ha ensalzado la estabilidad del PRC cuando gobierna con otros socios frente a potenciales “gobiernos retrógrados” con PP y Vox como aliados.

Sigue las claves de la campaña con el boletín Diario de elecciones.