Podemos entra en el debate sobre el clima y carga contra el PP por Doñana

A dos semanas del inicio de la campaña para las autonómicas y municipales, Podemos entra de lleno en el debate sobre el clima. En plena sequía, con temperaturas inusualmente elevadas para el mes de abril y el conflicto abierto por el plan de la Junta de Andalucía para regularizar los regadíos en el entorno del parque natural de Doñana, la secretaria general del partido, Ione Belarra ha atacado con dureza este viernes a la formación de Alberto Núñez Feijóo por el choque desatado por su grupo en Bruselas. “El PP está a medio telediario de decir que la Comisión Europea es socialcomunista”, ha ironizado la ministra de Derechos Sociales en un acto de Podemos para presentar el bautizado como “escudo climático” —una batería de medidas que busca paliar la situación que atraviesa el país— y colocar el tema en el eje de la campaña. La líder de la organización, acompañada de varios de sus candidatos el 28 de mayo, ha pedido también “valentía” al PSOE para restringir el consumo de agua por parte de la agroindustria.

Las iniciativas dadas a conocer este viernes, que el partido quiere impulsar dentro del Gobierno de coalición, llegan en plena batalla del PP con la Comisión tras las críticas del líder de los conservadores en la Eurocámara, el alemán Manfred Weber, al comisario de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevičius, que advirtió de los efectos “desastrosos” para el ecosistema del plan de la Junta en la principal reserva ecológica de Europa. Weber acusó esta semana a Sinkevičius, encargado de este asunto, de “hacer campaña por Pedro Sánchez”. El presidente del Gobierno, el jueves, fue también muy duro con Feijóo, al acusarlo de “dañar la imagen de España”.

“No espero nada del Partido Popular”, ha manifestado Belarra, que ha vuelto a definir al presidente andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla, uno de los barones más cercanos al líder, como el “Bolsonaro andaluz”. “El PP está a medio telediario de decir que la Comisión Europea es socialcomunista porque le están denunciando y dejando en evidencia”, ha criticado la secretaria general de Podemos antes de tachar de “salvajada ecológica” la norma que plantea la legalización de regadíos en el entorno del parque. “Lo único que podemos hacer es la suficiente presión desde los gobiernos y la sociedad civil para que retiren inmediatamente esa ley y que se cierren de una vez por toda los pozos ilegales en Doñana”, ha animado la ministra.

En línea con la estrategia marcada por su partido desde hace meses, Belarra ha reclamado a su socio de Gobierno que intervenga y aplique restricciones de agua. “Yo sí espero algo más del PSOE y le pido que seamos valientes. Que si hay que mirarle de tú a tú a la agroindustria que está empobreciendo a nuestro campo, que lo hagamos, que si hay que hacer moratorias de agua a esa agroindustria, que lo hagamos, que seamos valientes. Porque hay que decir una verdad incómoda y es que estamos gastando un agua que no tenemos”, ha enfatizado la secretaria general de Podemos, que, en contraposición, ha pedido blindar el consumo de agua por parte de la población y las explotaciones agrícolas y ganaderas de pequeños y medianos productores autóctonos.

Asunto fundamental en la contienda

A 15 días del comienzo de la campaña, fuentes de Podemos admiten que este tema, que ya ha sido motivo de disputa entre PP y PSOE estas semanas, se convertirá en uno de los asuntos fundamentales en la contienda. De hecho, Belarra ha estado acompañada en la presentación de este viernes del responsable de Programa del partido, Pablo Echenique, y de sus candidatos en la Región de Murcia (María Marín), la ciudad de Madrid (Roberto Sotomayor) y Sevilla (Susana Hornillo). Entre las iniciativas recogidas en el plan, la formación plantea reducir el consumo de agua con medidas como una moratoria a la apertura de regadíos hiperintensivos y macrogranjas en manos de grandes propietarios y fondos buitre o reforzar la eficiencia y la sostenibilidad de los recursos hídricos a través de un paquete de propuestas a medio plazo como modernizar el riego e incrementar infraestructuras de recuperación y depuración.

La formación incluye en su documento ayudas directas y líneas de crédito para “no dejar caer” ninguna pequeña o mediana explotación agrícola o ganadera, un refuerzo inmediato de los servicios de extinción de incendios y protección civil y la adaptación de las condiciones laborales a las olas de calor —con material adecuado y la prohibición de trabajar en exteriores entre las doce del mediodía y las seis de la tarde a partir de determinada temperatura—. También contempla la protección de las personas más vulnerables frente a las olas de calor, con la “obligación legal” de disponer de ventiladores, aspersores o equipos de aire acondicionado en todos los centros educativos, de salud, hospitales, o residencias de ancianos, entre otros, y habilitar “refugios climáticos, frescos y bien ventilados”, donde se proporcione hidratación de forma gratuita a la ciudadanía, priorizando a las personas sin hogar o en situación de infravivienda. La formación reclama, asimismo, prohibir la tala de árboles por parte de la Administración y limitar el tráfico en las calles más calientes.