Podemos y Yolanda Díaz escenifican su alejamiento

La batalla se recrudece en público, donde ya nadie disimula las diferencias. A 40 días de las elecciones municipales y autonómicas, Yolanda Díaz y Podemos cruzan reproches y complican el acuerdo para ir juntos a las elecciones generales bajo el liderazgo de la vicepresidenta segunda del Gobierno. “Si tú pides la unidad a torta limpia, a tu electorado lo estás deprimiendo, y luego da igual que te des la mano”, alertó Díaz el domingo durante una entrevista en La Sexta. La responsable de Trabajo también sugirió que no apoyaría a la candidata de Unidas Podemos (UP) en la Comunidad de Madrid el 28 de mayo y cuestionó el papel actual de Iglesias. “No sé en qué ayuda la ensalada de hostias de ayer”, respondió muy duro el antiguo líder de Podemos al día siguiente. El partido, muy molesto con las declaraciones de la dirigente gallega —y particularmente crítico con ella en los últimos tiempos—, insistió este lunes en “tender la mano” y llamar a la unidad, pero la distancia crece con cada nuevo enfrentamiento a las puertas de unos comicios que resultan clave para el futuro de UP. Tanto la organización que dirige la ministra Ione Belarra como Izquierda Unida —que concurren juntos en 10 de las 12 comunidades en juego— han trasladado ya a la vicepresidenta un listado de municipios donde les gustaría recibir su apoyo en campaña.

“Es muy preocupante que Yolanda Díaz siga reforzando esa idea, esa posibilidad, de que Podemos y Sumar no vayamos juntos a las elecciones. Eso genera mucha tristeza en mucha gente y creo que a Podemos nos toca hacer nuestra parte, que es llegar a más acuerdos que nunca para estas elecciones municipales y autonómicas, defender la unidad y seguir defendiendo, a pesar de los reproches, un acuerdo de coalición entre Podemos y Sumar para las siguientes generales”, resumió sin ambages la número dos de la formación, Irene Montero. La titular de Igualdad, en un acto con las bases del partido el sábado, había respondido a Díaz en los mismos términos que lo hizo en su día con la presidenta de la Comunidad de Madrid, por haberse quejado de que siempre la pusieran como “mujer de“ algún hombre. “Ya se lo dije una vez a [Isabel Díaz] Ayuso: yo sí soy mujer de, de Ione Belarra y mujer de Podemos, y estoy orgullosa de pertenecer. Estoy orgullosa de no estar nunca sola, de ser la mujer que forma parte de un proyecto colectivo, porque solas no vamos a ningún sitio”, afirmó entre aplausos.

“Nuestro compromiso [con la unidad] está claro: si hay voluntad de firmar ese acuerdo para primarias abiertas [condición que marcó públicamente Podemos para acudir al lanzamiento de su candidatura hace más de dos semanas], yo estoy disponible esta tarde, la semana que viene o después de las elecciones de mayo”, afirmó Belarra a primera hora en RNE cuestionada por la predisposición de su partido a pactar con Díaz. “¿Tú te crees que si le firmamos un documento hoy a Podemos, a su secretaria general, diciendo eso, están dentro de Sumar? Yo te digo que no. ¿Sabes cómo se llega a acuerdos? Cuando se quiere llegar a acuerdos”, había cuestionado las intenciones de la formación la vicepresidenta.

La entrevista del domingo ha sentado muy mal al partido que la designó hace dos años como líder del espacio, aunque este ya se ausentó de la presentación del 2 de abril. Especialmente “ofensiva” resulto para algunas fuentes consultadas la respuesta de Díaz a la pregunta de si el 28-M votará a la candidata de Más Madrid, Mónica García, o a la de Unidas Podemos, Alejandra Jacinto. El dilema de Yolanda Díaz es claro porque ella, como vicepresidenta del Gobierno, es el principal rostro institucional de Unidas Podemos, pero Más Madrid es un actor relevante en la nueva plataforma electoral que está creando, Sumar. Y, para complicar más la situación, en Sumar también está, de forma muy prominente, Izquierda Unida, que en Madrid concurre con Podemos. “Tú te imaginas a quién voy a votar, digo yo. Como toda España”, le respondió Díaz al entrevistador, Jordi Évole, con una sonrisa. Aunque evitó especificar más, no desmintió al periodista cuando este afirmó que creía que votará a Mónica García, de Más Madrid.

“A mí me parece que los mejores candidatos son los de UP”, valoró Belarra esquivando el choque. La propia Jacinto, en rueda de prensa, declinó comentar la reacción de la vicepresidenta: “Me siento convencida de estar haciendo las cosas bien, de haber sumado en Madrid a todas las fuerzas políticas que han querido sumar”, dijo en alusión a la negativa de Más Madrid a ir con ellos. Fuentes de algunos partidos próximos al proyecto reconocen en privado que la entrevista no ha contribuido a la unidad. En un articulo publicado en Ctxt, Pablo Iglesias analiza la entrevista y concluye que, aunque esta “aleje aún más a Yolanda y a Sumar de Podemos”, “la necesidad de que no caigan los gobiernos progresistas” justifica seguir intentando un acercamiento para ir juntos a las elecciones. “No sé en qué ayuda la ensalada de hostias de ayer a que nos vaya bien en las elecciones municipales y autonómicas. Tendría más sentido hablar de las propuestas, del programa, de cómo frenar a la derecha”, sostuvo también en Rac1 antes de criticar, en la charla del domingo, “el ninguneo a las mujeres que mandan en Podemos y justificar su papel actual. “Cuando [Díaz] decía ‘se debería callar y dejar volar’... Yo lo que hago es lo que me ha pedido mi secretaria general. Ione Belarra me dijo: ‘Nosotros no tenemos a nadie en la tele que defienda nuestras ideas, tú eres un activo mediático y tienes que ser eso”, explicó.

Tanto Podemos como Sumar han querido marcar distancias con el otro últimamente. El partido de Belarra aprovechó la Fiesta de la Primavera celebrada en Zaragoza este fin de semana para reivindicarse ante los suyos “como un proyecto distinto” al de Díaz, mientras que la vicepresidenta ha afeado el “ruido” que provoca alguna de sus estrategias y afirmó en una entrevista en EL PAÍS que un Sumar sin Podemos “no sería un fracaso”.

La disputa pública se produce en un contexto preelectoral y ante el temor, reconocido por el partido, de que las fricciones pasen factura a sus candidatos. Según trasladan fuentes de la formación, la secretaria de Organización de Podemos, Lilith Verstrynge, envió personalmente hace algo más de un mes al equipo de Díaz un borrador de calendario de campaña para poder cuadrar agendas y que la vicepresidenta acudiese a apoyar las candidaturas de UP “allí donde existen acuerdos de unidad, abiertos a las preferencias territoriales” que pudiera tener. Izquierda Unida, según confirmó este lunes su portavoz federal, Sira Rego, hizo lo propio, y desde el entorno de Díaz indican que las peticiones se extienden también a otros partidos. El calendario final se hará público en unos días, señalan.

Por lo pronto, Díaz acudirá este sábado a Barcelona para respaldar a su alcaldesa, Ada Colau, en plenas celebraciones de Sant Jordi. Se prevé que en mayo la vicepresidenta viaje a Galicia, donde su padre, Suso Díaz, y el asesor económico del ministerio de Trabajo Manuel Lago cierran la candidatura conjunta de Podemos —cuya dirección es afín a la líder de Sumar—, Esquerda Unida y Alianza Verde en A Coruña. Ante un escenario complejo, menos movilizado para la izquierda y de crecimiento de las derechas, el respaldo de Díaz a unos u otros puede ser determinante para ampliar opciones el 28-M. Queda por ver si la campaña servirá de tregua para aplacar, aunque sea por unos días, el conflicto interno.

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