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El presidente de Argelia advierte de que las relaciones con España están “congeladas, pero no canceladas”

Tebún acusa al Gobierno de Sánchez de haber dado “un paso en falso” sobre el Sáhara mientras expresa “respeto total” al rey Felipe VI

Juan Carlos Sanz
Abdelmayid Tebun
El presidente de Argelia, Abdelmayid Tebún, en un reunión del Gobierno, el 5 de febrero en Argel.Europa Press

Tras cinco meses de silencio, el presidente de Argelia, Abadelmayid Tebún, se ha pronunciado sobre las relaciones con España para advertir de que “están congeladas, pero no canceladas” desde la suspensión en junio pasado del Tratado de Amistad y Buena Vecindad entre ambos países. En un inusual encuentro con la prensa argelina, el mandatario responsabilizó en la noche del viernes al Gobierno español de haber dado “un paso en falso” y cometido un “acto hostil”, en alusión al giro dado por el presidente Pedro Sánchez al alinearse hace un año con la tesis favorable a la autonomía del Sáhara Occidental dentro de Marruecos por considerarla como la “más seria, realista y creíble”.

El mandatario argelino se hizo eco el pasado septiembre de la intervención de Sánchez ante la Asamblea General de la ONU, en la que matizó que España defiende “una solución política mutuamente aceptable” en el marco de Naciones Unidas. Calificó sus palabras como “un posible retorno de España al consenso europeo sobre la cuestión saharaui”. Pocas semanas antes, el presidente del Gobierno español había declarado en Alemania que le “encantaría” poder viajar a Argel, en un aparente gesto de buena voluntad.

“No hay nada nuevo” sobre las relaciones con España, ha precisado ahora en unas declaraciones en las que destacó los avances de Argelia en el plano diplomático gracias a la estabilidad y la fuerza de su economía, según informa la agencia estatal de noticias APS. Frente a las alusiones al giro del Gobierno sobre el Sáhara, Tebún fue más explícito al afirmar: “Personalmente, me siento profundamente disgustado por el estado de las relaciones con España, pero Argelia no está en el origen de esta crisis […]. El pueblo español, con el que las relaciones son muy buenas, no tiene nada que ver, y sentimos un total respeto hacia el rey de España, y él lo sabe”.

La situación “no pinta bien”, enfatizó Tebún, citado por Efe. Fuentes diplomáticas magrebíes y europeas coinciden en considerar como temporal la congelación de las relaciones bilaterales. Argel parece haberlas dejado en suspenso, a la espera de los resultados de las elecciones legislativas previstas en los próximos meses y de que un eventual relevo al frente del Gobierno retrotraiga a España a su posición anterior sobre el Sáhara: el plan de autodeterminación mediante un referéndum, que abriría la puerta a la independencia, diseñado hace tres décadas por Naciones Unidas.

“Respecto al resto de los organismos [españoles], continuamos trabajando con ellos”, puntualizó el jefe del Estado magrebí. Argelia ha reducido a un tercio las importaciones desde España, que han pasado de 2.906 millones de euros en 2019 a 1.010 millones en 2022. Las exportaciones argelinas hacia España, sin embargo, crecieron casi un 85% al elevarse de desde 3.851 millones hace tres años hasta 7.105 millones el ejercicio pasado.

En medio de la crisis diplomática con Madrid, Argel no ha interrumpido el flujo de gas y petróleo, cuyo precio se ha disparado a causa de la guerra en Ucrania. A pesar de las reclamaciones españolas ante Bruselas para que Argelia acate el Tratado de Asociación que suscribió con la UE, se mantiene de hecho el veto a la importación de productos españoles al permanecer bloqueadas las operaciones bancarias comerciales entre ambos países.

En su encuentro con la prensa, Tebún también destacó el fortalecimiento de las relaciones con Italia, que se ha convertido en el principal importador de gas argelino tras haber desplazado a España. “Esta situación no complace a ciertos países europeos, pero Argelia es libre en sus relaciones internacionales y económicas y defiende sus intereses”, remachó. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, viajó el mes pasado a Argel para impulsar la construcción de un nuevo gasoducto entre ambos países, con el objetivo de poner fin a la dependencia energética italiana de Rusia. Argelia suministra gas natural a España mediante el gasoducto Medgaz, que enlaza directamente con la costa andaluza. Tras romper relaciones diplomáticas con Marruecos en 2021, Argel dejó de enviar gas por el Gasoducto del Magreb, la tubería que conecta con la península Ibérica a través del estrecho de Gibraltar.

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Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

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