La Fiscalía pide la absolución de Errejón en el juicio por darle una supuesta patada a un hombre

Iñigo Errejón, diputado de Más País, ha vuelto este viernes a sentarse en el banquillo de los acusados. El parlamentario ha regresado a los madrileños juzgados de Plaza de Castilla, donde se ha celebrado la vista oral fijada contra él por cometer supuestamente un delito leve al dar supuestamente una patada a un vecino de Lavapiés, un barrio de la capital, el 2 de mayo de 2021, apenas unas horas después del cierre de la campaña para las elecciones autonómicas a la Comunidad. “Yo no he dado una patada a nadie en mi vida”, ha declarado Errejón. La Fiscalía ha pedido su absolución: “No ha quedado acreditado que Errejón haya sido autor de un delito“.

El ministerio público, que se ha manifestado este viernes por primera vez sobre el caso, ha añadido: “Las versiones son contradictorias [...] No existe una prueba de cargo para poder enervar la presunción de inocencia”. “Existen unas imágenes donde no se llega a ver que se haya producido esa patada”, ha apostillado la fiscal.

El choque de versiones ha resultado evidente. El denunciante, Alberto Domarco, y Errejón han ofrecido dos testimonios contradictorios. En su narración, el primero asegura que se acercó al diputado en la noche del 2 de mayo para pedirle que se hiciera una foto con él. Según sus palabras, el político se negó y, a continuación, tras insistir la supuesta víctima con que se había hecho “una foto hasta con [Juan Carlos] Monedero”, el parlamentario le propinó repentinamente la patada.

—¿Usted es de ultraderecha? —le ha preguntado a Domarco su propio abogado.

—No, soy votante del Partido Popular —ha respondido el denunciante.

Errejón niega en rotundo el relato de la acusación. No solo la agresión. Sino también la sucesión de hechos. Según el diputado, Domarco le pidió una foto de forma insistente y repetitiva, con tono “burlón” e incluso insultos —”Eres más tonto de lo que pareces”, afirma que le llegó a espetar—. “En una de esas me dice: ‘Venga rojillo, cómo no te vas a sacar una foto”, ha explicado, antes de describir cómo el denunciante trató entonces de pasarle el brazo por encima. “Yo le aparto el brazo. Pero no le he dado una patada a nadie en mi vida”, ha subrayado el político. Según ha añadido la Policía después, ninguna cámara captó el incidente con nitidez.

Este proceso se prolonga desde hace casi un año. El juicio iba a celebrarse el pasado enero, pero se suspendió para que se aclarase si la magistrada elegida para la vista, al haber sido también la instructora, debía abstenerse por verse comprometida su “imparcialidad”. De hecho, esta fue remplazada finalmente y otro juez ha dirigido este viernes la sesión.

El diputado, fundador también de Podemos, siempre ha negado la agresión, pero la instructora consideró que existían elementos suficientes para celebrar la vista. Eso sí, antes descartó el delito de lesiones después de que los médicos forenses no encontraran “ninguna lesión traumática” derivada del supuesto golpe. Pese a que el político se encuentra aforado ante el Tribunal Supremo, la ley permite que estos delitos leves se diriman en los juzgados ordinarios. En el caso de acreditarse la imputación, Errejón sería condenado como máximo al pago de una multa.