Espadas busca distanciarse de Ferraz el mismo día en el que Díaz dice que sabe que “no es la candidata de Madrid”

No son buenos tiempos para mostrarse como el candidato de Pedro Sánchez y la dirección nacional del PSOE, en plena resaca por el fiasco electoral en la Comunidad de Madrid tras una campaña en la que el jefe de Gabinete del presidente, Iván Redondo, ha quedado señalado. Por eso, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha hecho especial hincapié en desprenderse de esa vitola en su carrera en las primarias a candidato socialista a la Junta de Andalucía. “La voz la tienen las bases, no Ferraz”, ha señalado. El mismo discurso que lleva pregonando su rival, la secretaria general de los socialistas andaluces, Susana Díaz, que este sábado ha ido un paso más allá y ha reconocido públicamente que sabe que no es la favorita de la cúpula de su formación.

“Sé que no soy la candidata de Madrid, pero quiero ser la candidata de los militantes”, ha señalado esta mañana desde Córdoba antes de un encuentro con las bases de su partido en esa localidad. Díaz está inmersa desde hace semanas en una gira por Andalucía en la que se está reuniendo con alcaldes, agrupaciones y asociaciones de todo tipo que le sirven de base para censurar la labor del Gobierno del popular Juan Manuel Moreno Bonilla. La estrategia de la ex presidenta de la Junta pasa por un distanciamiento claro de Sánchez que incluye críticas directas a su gestión —algo que no había ocurrido desde que ambos pactaran una tregua hace dos años—. Por ejemplo, este sábado ha insistido en su oposición a implantar un peaje en la red de carreteras públicas. “Las grandes fortunas tienen que hacer un esfuerzo y dar aliento al bolsillo de los trabajadores. Poner peajes en las autopistas es evidentemente cargar el bolsillo de los miles de trabajadores que bastante han pasado en este año”.

Mientras Díaz sigue su ruta andaluza, su rival, Espadas, la inicia oficialmente este domingo con un acto con militantes en Granada, la capital de la provincia con más militantes del PSOE en la comunidad y cuya ejecutiva provincial se mostró a favor de un adelanto electoral. Esta tarde, en una entrevista para los informativos de Radio Sevilla de la Cadena Ser, ha apelado a la necesidad de un cambio para poder recuperar la Junta de Andalucía. Esa idea de alternancia frente a continuidad será el eje de su campaña, en la que también destacará la importancia de las políticas de transición ecológica —que ha empezado a implantar en Sevilla―y el peso de los ayuntamientos en la toma de decisión en el ámbito regional.

Y en esa senda del cambio, Espadas también ha querido poner en valor su perfil moderado. “El PSOE debe cambiar su estilo político, ha que respetar al adversario y hay que hacer propuestas constructivas”, ha afirmado. “Si hay un cambio podremos recuperar y ampliar los 500.000 votantes que no fueron a votar”, ha insistido en alusión a la pérdida de votos cosechada por su partido en las elecciones autonómicas del 2 de diciembre de 2018 y a una falta de movilización que los analistas apuntan como una de las claves que llevaron a la pérdida por los socialistas del Gobierno andaluz por primera vez en 36 años de democracia, pese a haber ganado las elecciones.

Díaz reitera que ella ya ha hecho una reflexión y autocrítica sobre los resultados de esas elecciones, y que en este tiempo ha venido realizando “una escucha activa” que también pasa, como en el caso de Espadas, por atender las necesidades de los alcaldes. La secretaria general de los socialistas se hace fotos con regidores y miembros de agrupaciones, mientras que, de momento, en los actos de Espadas desde que se postuló oficiosamente para las primarias, siempre ha estado acompañado por dirigentes provinciales o ministros, la última la de Hacienda, María Jesús Montero, este jueves en Castilleja de la Cuesta, el mismo día en que se convocaba de manera oficial el adelanto de las elecciones internas.

Ambos contendientes parten con las fuerzas aparentemente muy igualadas, si se atiende a las personas cercanas a sus respectivos equipos, pero en ese duelo, y hasta que se presenten los avales, aún caben más candidatos. El último, Luis Ángel Hierro, exdiputado por Sevilla y profesor de Economía de la Universidad de Sevilla, anunció que concurriría este viernes a través de su cuenta de Twitter. Hierro es un viejo asiduo a las primarias de su partido. En 2011 aspiró a medirse con Alfredo Pérez-Rubalcaba para ser candidato a la presidencia del Gobierno y en 2017 apoyó a Sánchez en los comicios en los que se impuso a Díaz y a Patxi López como secretario general.