Detenido el supuesto autor del apuñalamiento mortal del sacristán de una iglesia en Jaén

La Guardia Civil ha dado ya por resuelto el caso del homicidio del sacristán de una iglesia de Alcalá la Real (Jaén), que murió este viernes apuñalado a las puertas del templo. El presunto autor, un hombre de nacionalidad rumana de 33 años, fue detenido apenas dos horas después con restos de sangre en su ropa y este sábado ha confesado ser el responsable del crimen, según han indicado fuentes de la investigación.

Francisco Zúñiga, de 52 años, era el sacristán de la iglesia de la Consolación de Alcalá la Real (21.700 habitantes). Anoche, mientras se ofrecía un oficio religioso en el interior del templo, mantuvo una acalorada discusión con el ciudadano rumano que solía ponerse a pedir en la puerta de la iglesia, según explican fuentes cercanas al caso. La víctima reprendió al agresor por no llevar mascarilla y querer acceder al recinto y, acto seguido, Zúñiga recibió varias puñaladas que le provocaron la muerte casi inmediata. La Guardia Civil sigue buscando el arma blanca con el que se cometió el crimen.

Gracias la colaboración ciudadana y a los testigos de los hechos, la Policía Local de Alcalá la Real detuvo dos horas después al principal sospechoso autor confeso del crimen cuando intentaba refugiarse en la vivienda de otros compatriotas que viven en la misma localidad. Fuentes de la investigación han asegurado a este diario que el detenido, que llegó a Alcalá como temporero de la campaña de la aceituna, tenía antecedentes por apuñalamientos similares y agresiones en otros países de Europa y también, en 2017, en la localidad cordobesa de Adamuz.

El Ayuntamiento de Alcalá la Real, que ha decretado un día de luto oficial, ha celebrado este medio día una concentración de repulsa por el crimen con la presencia de todos los miembros de la corporación y de familiares del sacristán, que también era empleado de la empresa que gestiona la zona azul y trabajaba como macero en los actos solemnes del Consistorio. Zúñiga será enterrado esta tarde en una misa que presidirá el obispo de Jaén, Amadeo Rodríguez.

El alcalde alcalaíano, Marino Aguilera (PP), ha agradecido la colaboración ciudadana y ha hecho una llamada a la calma y a la convivencia pacífica. “Son momentos difíciles y de indignación, pero el presunto asesino ya ha sido detenido y hay que dejar que la Justicia siga su curso”, ha señalado Aguilera, al tiempo que ha pedido que cesen “los mensajes de odio” que circulan por las redes sociales desde que se conoció el crimen. “El odio no arreglará nada”, ha dicho.

Desde el Ayuntamiento se quiere también evitar la concentración que, a través de distintos foros y redes sociales, se ha convocado para esta tarde. “No hay que concentrarse para reclamar venganza ni para estigmatizar a ningún colectivo que vive en Alcalá de forma pacífica”, ha dicho Aguilera.

Mientras tanto, Vox ha utilizado el suceso para su campaña contra la inmigración. “¿Qué pinta en España un mendigo magrebí en edad militar y plena salud que debería estar trabajando en su país? ¿cuántos miles de mendigos magrebíes entran cada semana en España gracias a Marlaska?”, se preguntaba el miembro de la fuerza de extrema derecha, Hermann Tertsch, que, además, confundía la nacionalidad del presunto homicida.

Alcalá la Real es uno de los municipios que mayor contingente de mano de obra extranjera ha recibido en la campaña de recogida de la aceituna, que ya da sus últimos coletazos. De hecho, el albergue para temporeros cerró ayer sus puertas y ha sido uno de los que ha permanecido abierto más tiempo de toda la red provincial. Su ocupación ha sido del 50% en los últimos días y las nacionalidades predominantes son las de los países del Magreb y también la rumana.

En el caso de Alcalá la Real no están arraigados los posos de la conflictividad social surgida en otros puntos de la provincia en las últimas semanas, sobre todo con los disturbios de Linares. El municipio alcalaíno es uno de los que presenta unos índices más altos de industrialización de la provincia, que combina con el tejido económico que aporta la agricultura.