La borrasca Dora trae un puente de mucho frío, olas de nueve metros, vientos fuertes y nieve en varias capitales

El primer temporal del invierno meteorológico se ha convertido este jueves en la borrasca Dora, la cuarta con nombre de la temporada. Su centro se sitúa en las islas Británicas y la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha emitido un aviso especial para alertar de su intensidad. Dejará nevadas copiosas en zonas de montaña y cotas bajas y un potente temporal marítimo, con olas de hasta nueve metros, que han llevado a decretar el aviso rojo en Galicia el viernes y el sábado. También arrastra fuertes vientos del noroeste y provocará un desplome de las temperaturas. Este jueves, ya hay activados avisos por nieve, viento y mala mar en Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra, Aragón y las dos Castillas. Los más graves, de nivel naranja, son por mala mar en Galicia, Asturias, y Cantabria, mientras que los de nieve son todos amarillos y afectan a las siete comunidades citadas salvo Castilla-La Mancha y País Vasco.

Como “aperitivo” de Dora, las mínimas han sido muy bajas por la madrugada, explica el portavoz de Aemet Rubén del Campo. Las heladas han sido generalizadas, especialmente en Pirineos y zonas próximas, el interior de Galicia, ambas mesetas y el interior de Andalucía oriental. Los valores más fríos se han dado en cumbres del Pirineo, como en Baqueira, donde se ha bajado a -11,2ºC o en Port Ainé, a -10ºC, pero las heladas también han sido intensas en páramos del centro y en la meseta norte, con los -8ºC en Molina de Aragón (Guadalajara), -7,8 en Cuéllar (Segovia) o -7,5ºC en Bello (Teruel). Las capitales de provincia más frías han sido Salamanca (-6ºC), Palencia y Teruel, ambas con -5ºC. En lo que va de día, se han producido chubascos intensos en Canarias, Alicante y Baleares así como vientos fuertes con rachas de 100 kilómetros por hora en Estaca de Bares (A Coruña) y de 77 en Cabo Busto (Asturias).

La tarde de este jueves se esperan precipitaciones en Galicia que alcanzarán al resto de las comunidades cantábricas y al noroeste de Castilla y León. La cota de nieve bajará al final del día a 600-800 metros. En el Cantábrico, habrá olas de hasta ocho metros, que pueden ser mayores en el litoral de A Coruña. Los vientos soplarán con fuerza en buena parte de la comunidad gallega, en el Cantábrico, norte de Castilla y León y puntos del sureste peninsular, con rachas de 80-90 kilómetros e incluso más de 100 en puntos del litoral cantábrico. En Canarias continuará el ambiente inestable, con chubascos localmente fuertes y tormentosos, principalmente en La Palma. Las temperaturas suben en el centro y mitad norte, aunque bajan por el sur.

Esta bajada se generalizará el viernes. Los termómetros marcarán de dos a cuatro grados menos en parte del interior e incluso de seis a ocho grados menos en puntos del Cantábrico y el sur de Aragón. En cambio, habrá un ligero ascenso en el litoral sureste y Baleares. Los termómetros marcarán menos de 10 grados en 23 capitales de provincia. Los vientos serán fuertes en zonas de montaña, donde llegarán a los 80-90 kilómetros. En buena parte de la Península las lluvias serán intensas, persistentes y tormentosas sobre todo en el Cantábrico.

La cota de nieve bajará a lo largo del día, hasta situarse a 400-700 metros en el noroeste mientras que en el centro y nordeste peninsular estará en 500-800 metros y en 600-800 en la mitad sur y Baleares. “Puede nevar en cotas bajas, pero la mayor parte de la precipitación será en forma de lluvia”, rebaja las expectativas Del Campo. La predicción de Aemet contempla que puede nevar en Ávila, Cuenca, León, Salamanca, Segovia y Soria.

El sábado será “muy frío”, con heladas en amplias zonas del interior y en zonas de montaña lo hará durante toda la jornada. En Pirineos, sistema Central y cordillera Cantábrica se podrá bajar de -10ºC, mientras que en páramos de Guadalajara, Teruel y sur de Soria se podrán rondar los -8ºC y en las mesetas, los -5ºC. Las temperaturas diurnas quedarán por debajo de los 5ºC en amplias zonas del interior.

El frente terminará de atravesar la Península por el sureste, lo que regará Baleares, Melilla, área del Estrecho y sistemas béticos. En el área cantábrica y a los Pirineos las lluvias pueden ser persistentes y localmente fuertes, además de estar acompañadas de tormenta.

El domingo habrá lluvias en el Cantábrico, Pirineos, Baleares, Melilla y área del Estrecho, aunque el aire frío se irá replegando y la cota de nieve aumentará a 1.000-1.300 metros. El viento seguirá soplando del oeste con rachas fuertes y habrá mala mar. Aún habrá heladas en el interior peninsular y los termómetros seguirán entre tres y cinco grados por debajo de lo normal.

El lunes, Dora será historia. Las precipitaciones más intensas se producirán en Galicia, noroeste de Castilla y León y área cantábrica. También se espera agua en el norte de las islas Canarias más montañosas. Las temperaturas subirán debido a que los vientos del oeste, intensos en muchas zonas, serán más templados que los de ahora. La cota de nieve se situará en torno a los 2.200 metros y helará en zonas de montaña. Esta situación continuará el martes, día en que los vientos pueden intensificarse, de nuevo con temporal marítimo, y las temperaturas volverán a bajar, por lo que la cota de nieve estará en 700-800 metros.