Enrique López recula y afirma que es “imposible” negociar ahora la renovación del Poder Judicial
El responsable de Justicia del PP dice que la actitud de Podemos en el Gobierno impide las conversaciones
El responsable del área de Justicia del PP, Enrique López, ha pasado de afirmar en la mañana de este lunes que su partido está dispuesto a negociar en septiembre la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Constitucional a matizar, solo unas horas después, que esas conversaciones son “imposibles” en este momento. Ambos órganos se encuentran en situación de interinidad desde hace meses y los dos principales partidos han mantenido contactos en los últimos meses para dar luz verde a un pacto que, a día de hoy, sigue sin tener fecha.
“En estos momentos, una parte del Gobierno de coalición, el conformado por Podemos, mantiene un claro cuestionamiento y ataque al orden constitucional, pidiendo la abdicación del Rey y favoreciendo de una forma más o menos intensa la posibilidad de un proceso de independencia de Cataluña. Y, todo ello, con la presencia de un vicepresidente del Gobierno y líder de Podemos que insulta, cuestiona y deslegitima permanentemente al Poder Judicial y sus miembros”, ha aclarado López, después de que apuntara en una entrevista en la cadena SER que ha mantenido contactos con el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, sobre la renovación del órgano de gobierno de los jueces.
En dicha entrevista, el responsable de Justicia del PP afirmaba que su partido estaba dispuesto a negociar en septiembre la renovación y advertía al Ejecutivo de coalición de que su predisposición no debía confundirse con un “mercadeo de puestos”. “Ahí no vamos a entrar”, apuntaba reclamando perfiles independientes.
El mandato del CGPJ caducó en diciembre de 2018. Entonces, PP, PSOE y Podemos llegaron a pactar para su Presidencia al magistrado del Tribunal Supremo Manuel Marchena, pero éste acabó renunciando a su candidatura después de que se filtrara un whatsapp del popular Ignacio Cosidó presumiendo de que, con este juez al frente del Poder Judicial, se podría controlar la Sala Segunda del alto tribunal “desde detrás”.
