Grillo Hop Hop 2014: vibrantes armonías

Tiempos de zozobra en Somontano, donde Enate impulsó una oferta vanguardista, fusionando arte y vinicultura, con la idea de elaborar solo vinos de altísima calidad en producciones restringidas. Una apuesta arriesgada que terminó generando graves problemas y quiebras sonadas cuando el impulso inicial no se consolidó en los mercados.

Pues bien, la bodega El Grillo, creada hace 10 años, insiste en la misma fórmula de poco y exquisito. Sin embargo, sus precios elevados se lo ponen difícil, por mucho que pretendan engatusar al nuevo consumidor con su desenfadado diseño. Ciertamente, ha logrado tintos de potente factura, como Grillo PS (125 euros), pero donde, en mi opinión, acierta es con el más económico, Grillo Hop Hop (onomatopeya de su salto), donde el uso de la variedad garnacha, hermanada con la syrah, refuerza el necesario carácter estilizado y fresco, evitando la pesada seriedad de los hermanos mayores.

Con una elaboración basada en el uso de la madera (fudres y barricas), el vino ofrece una composición aromática de vibrantes armonías, donde los frutillos rojos y negros maduros contrapuntean con las notas balsámicas y especiadas sobre la elegante presencia del roble. Voluptuoso, su fresca viveza mitiga felizmente su empalagoso gusto frutal.