Hospitalidad ‘millennial’ en Ibiza
Can Curreu es un hotel con ‘spa’ rodeado de naturaleza para disfrutar de la tranquilidad de la isla balear
Puntuación: 7,5 | |
Arquitectura | 7 |
Decoración | 8 |
Estado de conservación | 8 |
Confortabilidad habitaciones | 8 |
Aseos | 6 |
Ambiente | 9 |
Desayuno | 7 |
Atención | 8 |
Tranquilidad | 9 |
Instalaciones | 7 |
Sa Palmera, Es Repòs, S’Ametller, Es Niu, Es Pi, Sa Savina, Es Ponent, Es Garrover, Es Pouet, Es Bosquet, Es Cirer, Es Taronger, Es Llimoner, Es Girasol, Lavanda, Ses Terrasses, Ses Roques, Buganvilia, S’Olivera. Denominaciones de origen ibicencas para las 19 habitaciones que conforman esta agrupación de casitas bajas en el corazón de la isla, meca de los hippies que aterrizaron en aluvión durante las décadas de 1960 y 1970. Aún queda de esa época el sabor de los mercadillos de las Dalias y Punta Arabí; el bar de Ca Anita, donde se elabora el famoso licor de hierbas ibicencas, y el brío pionero de Vicente Marí, que abrió en su possessió familiar de 1800 uno de los primeros hoteles con encanto de Ibiza.
Can Curreu es un canto a la naturaleza y a los paraísos perdidos del ser humano. Su propietario ha luchado durante años por mantener el espíritu libre del lugar, pese a las carencias de las instalaciones y la estacionalidad turística insular, hasta que las sucesivas reformas han acabado por convertirlo en un destino clave del nuevo lujo millennial, renuente a la ostentación.
Can Curreu es también un canto a la autenticidad, palpable en los muros orondos y descuadrados de la arquitectura original, en los bancos tallados a mano, en la viguería de sabina y en el mobiliario importado de Lombok por la sorprendente similitud estética de esta localidad balinesa con la pitiusa.
Evocaciones parecidas a las que despierta el pequeño spa, diseñado como una cascada de sensaciones: hammam, duchas bitermales, pozo de agua fría y tumbonas calefactadas.
Todos los dormitorios son diferentes en sus propuestas decorativas, con un espacio generoso (más de 60 metros cuadrados) y equipamiento doméstico, cocina americana y chimenea incluidos en algunos. Quizá menos favorecidos son los baños, alicatados con una vistosa azulejería valenciana y techos tintados de colores vivos; no mantienen el mismo nivel de hospitalidad personalizada que el resto de las instalaciones.
Antes de que los gallos despierten a los trasnochadores, la piscina llama a un baño a solas con el paisaje circundante. A un lado, el pinar de la possessió hotelera. Al fondo, la bahía de Santa Eulalia del Río.
Can Curreu
- Categoría: agroturismo
- Dirección: carretera de San Carlos, Santa Eulalia del Río (Ibiza)
- Teléfono: 971 33 52 80
- Web: cancurreu.com
- Instalaciones: jardín, piscina climatizada, spa, sala de reuniones para 50 personas, salón de estar, cafetería, restaurante interior y al aire libre
- Habitaciones: 3 dobles, 3 junior suites, 13 suites
- Servicios: algunas habitaciones adaptadas para discapacitados; animales domésticos prohibidos
- Precios: desde 195 euros, desayuno incluido, 10% IVA aparte.
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