Sos del Rey Católico, ventana al gótico
Es uno de los pueblos mejor conservados de Aragón. Cuna de Fernando el Católico, fue plató para la película ‘La vaquilla’ y ahora vuelve a ser escenario de la serie ‘La catedral del mar’
Paseando por sus empedradas calles se respira un aire medieval. Con poco más de 600 habitantes, Sos del Rey Católico está situada en la zaragozana comarca de las Cinco Villas y se distingue por sus casas de piedra, sus fachadas con sillares y escudos y sus ventanas góticas y renacentistas, con aleros de madera. Aunque se ha encontrado algún vestigio prehistórico y restos de la época romana, el origen de la villa se remonta al siglo X, durante la reconquista al islam. Con un espectacular recinto amurallado, en el que destaca el castillo asentado sobre la Peña Feliciana, Sos del Rey Católico siempre fue un lugar estratégico entre los reinos de Aragón y Navarra.
10.00 El palacio de Sada
Entre las casas nobiliarias destaca el palacio de Sada (1) (siglo XV), donde nació Fernando el Católico el 10 de marzo de 1452 —al parecer, su madre, la reina Juana Enríquez, había viajado desde Sangüesa, en Navarra, hasta Sos, en Aragón, huyendo de la guerra en Navarra entre su marido, Juan II, y el hijo primogénito de este, Carlos de Viana—. Una fecha señalada que los sosienses conmemoran cada mes de marzo. Es uno de los edificios emblemáticos del pueblo, en piedra de sillería con una fachada rematada por almenas. Ahí se ubica ahora la oficina de turismo, desde donde se pueden gestionar las visitas guiadas. El conjunto de palacio e iglesia incluye San Martín de Tours (siglo XIII), que conserva valiosas pinturas murales de estilo gótico. Cerca destaca el palacio Español de Niño (2) (siglo XVI), de estilo renacentista, lugar donde se celebran actividades culturales.
11.30 Las 12 sillas
El rodaje del filme La vaquilla, de Luis García Berlanga, estrenado en 1985, se convirtió en una fiesta donde participa la gente de Sos del Rey Católico, de ahí que la Ruta de La vaquilla sea su merecido homenaje. Una original forma de recorrer el pueblo consiste en buscar las 12 sillas (con mención a actores como José Sacristán o Alfredo Landa) y una estatua de Berlanga realizadas en bronce por el escultor José Luis Fernández. Están colocadas estratégicamente, saliendo del portal de Zaragoza —el acceso principal de los siete portales conservados— y andando por la calle de Fernando el Católico hasta llegar al ayuntamiento. Una serie de próximo estreno en Antena 3, la adaptación de La catedral del mar, el best seller de Ildefonso Falcones, ha vuelto a hacer de esta localidad un plató de cine (en noviembre, el pueblo acogió al equipo de esta producción de ocho capítulos y 12 millones de euros de presupuesto, interpretada por Aitor Luna, Michelle Jenner y Silvia Abascal, y dirigida por Jordi Frades, que cuenta con 150 actores y 3.600 figurantes y se ha grabado en seis comunidades autónomas).
12.30 Los trazos de la judería
En lo alto del pueblo se alza la rehabilitada torre del homenaje (3) (siglo XII), ya que del castillo, construido en madera, no quedan apenas restos. Allí se emplaza la preciosa iglesia de San Esteban (siglo XII), con la cripta de Santa María del Perdón (siglo XIII), en cuya pila del siglo VIII fue bautizado Fernando de Aragón. Descendiendo se ve el trazado de vías de la judería (o barrio alto) y la popular plaza de la Sartén. Continuando hacia la plaza de la Villa encontramos el ayuntamiento (4) (siglo XVI), con una galería de arcos de medio punto y un gran alero de madera. A continuación, la Lonja Medieval (5), donde se reunía el concejo en la Edad Media —en su soportal se aprecian dos orificios excavados donde se guardaba el hielo— y que ahora alberga la biblioteca municipal. Terminamos en el soportal del mercado, que conserva el hueco en el que colgaba la balanza romana y la medida de la vara aragonesa (o jaquesa).
14.00 Una copa de vino de Cariñena
Es un placer degustar alguno de los productos con denominación de origen de la zona, como el ternasco de Aragón, el jamón de Teruel, el bacalao ajoarriero o el pollo al chilindrón, regados con algún vino de Cariñena o Somontano. Las mejores raciones las sirve el bar Landa (6) (barlanda.blogspot.com.es), y La Cocina del Principal (7) ofrece un menú degustación. Recomendables el revuelto de setas, la trucha, la sopa de ajo…, y entre los dulces, los crespillos de borraja y los pastillos de calabaza. Antes de dejar la localidad se puede visitar el monasterio de Valentuñana (8) (conventovalentunana.wordpress.com), a unos dos kilómetros, construido en el siglo XVII por los carmelitas descalzos. Hoy vive en él una comunidad de agustinos recoletos y funciona como hostal.
16.00 Excursión por el valle
Desde Sos del Rey Católico, varias son las opciones, dependiendo del tiempo de que se disponga, para hacer alguna excursión. Se puede recorrer el itinerario de la Val d’Onsella, un valle con media docena de pueblos como Navardún (9) —y su torre medieval—, Urriés, Lobera de Onsella y Longás, que mezcla la vida rural y el paisaje prepirenaico. Otra ruta incluye alguno de los otros pueblos de las Cinco Villas, como Sádaba (10), donde es un placer perderse por el entramado de sus calles, con edificios sobrios y casas nobiliarias. El espectacular castillo (siglo XIII), con sus siete torres, domina la villa desde el otro lado del río. Para senderistas, desde Carcastillo (11) se puede acceder al fabuloso paisaje semidesértico de las Bardenas Reales.
20.00 Yacimiento romano
De vuelta a Sos del Rey Católico, hacemos una parada en Uncastillo (12), en cuyo recinto amurallado destaca la torre del homenaje (siglo XIII). Con seis iglesias románicas, recomendamos la de Santa María la Mayor (siglo XII), con su singular torre fortaleza; la de San Martín de Tours —Centro de Arte Religioso del Prepirineo— y la de San Juan, con pinturas bizantinas del siglo XIII. Si le sobra tiempo, no olvide que a 15 kilómetros de Uncastillo se encuentra el yacimiento romano de Los Bañales (13) (siglos I y IV después de Cristo). Se conservan 32 pilarones de sillares desiguales de un acueducto que llevaba el agua a la población.
22.00 Descanso en el parador
Nos despedimos de Sos del Rey Católico cenando en su remodelado parador (14), una de las mejores ofertas de hostelería de la comunidad aragonesa. Otra opción es el original hotel Ruta del Tiempo (15), con habitaciones inspiradas en personajes representativos de la zona.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.