Tel Aviv a través de sus paredes
Los grafitis más destacados de una ciudad que se mueve entre la vieja ortodoxia y las últimas novedades artísticas
Más reconocida por sus playas y ocio nocturno que por su incipiente mercado cultural, la ciudad de Tel Aviv alberga entre sus paredes un desconocido conjunto de arte urbano aún por descubrir. Denominado por algunos como “liberalizador y efervescente”, este fenómeno cultural ha pasado a ocupar un destacado lugar en una ciudad cuyos habitantes se caracterizan por su extraordinaria facilidad para moverse entre las costumbres más recalcitrantes y las últimas novedades artísticas.
La mayor y más variada parte de estas "intervenciones", tal y como los artistas urbanos denominan a sus obras, están situadas dentro del bohemio y carismático barrio de Florentin, donde se localiza la zona conocida como de los carpinteros. Aquí, entre las calles Hanagarim y Abarbanel, las fachadas de las casas, los pequeños estudios y las naves han sido tomadas en los últimos años por artistas locales, que han encontrado en este lugar la posibilidad de llevar a cabo sus trabajos sin ser molestados ni expedientados por las autoridades municipales. De hecho, tanto vecinos como comerciantes apoyan este fenómeno que ha supuesto un notable impulso para la zona, amenazada por la salvaje especulación urbanística.
Además de Florentin, los cercanos barrios de Neve Tzedek o Jaffa también cuentan con interesantes creaciones. Un paseo por sus zonas menos transitadas, es decir, descampados y edificios en desuso, ofrecen al visitante la oportunidad de explorar zonas del Tel Aviv menos conocido y de paso descubrir a través de sus grafitis la difícil y sorprendente realidad de un país en constante conflicto social.
“En comparación con otros sitios del mundo, los artistas de aquí trabajamos en condiciones muy extremas desde hace muchos años debido a la situación política y social”, explica Dede, artista urbano israelí. “No obstante, y a pesar de eso, se están llevando a cabo trabajos de mucha calidad. Hay gente con mucho talento y eso se puede ver en las calles”, matiza. Este grafitero es conocido por incluir en todas sus obras la imagen de una tirita: “Son importantes para mí porque reflejan tanto el problema como la solución. Las utilizo para expresar mis preocupaciones personales, sociales y políticas”, cuenta.
Una de las alternativas más interesantes y asequibles para tomar el pulso a la zona, y conocer de primera mano a estos artistas y a sus obras, son las visitas guiadas del profesor Guy Sharett, que todas las semanas programa el Hebrew Graffity Tour. Otra opción que resulta recomendable antes de decidir qué área visitar es la de leer el blog Tel Aviv Graffiti& Street Art, desde donde dan a conocer los trabajos más interesantes y la localización de los mismos.
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