La primera exposición mundial del fotógrafo británico Perou sobre Marilyn Manson

“No sé cuál es la fuente de luz, pero parece leche. Creo que querías que esa fuera la portada de aquella revista y ellos dijeron que no”, le dice Manson a Peru en el libro 21 años en el infierno. Después critican a la publicación, pero no la nombran. La exposición en Málaga muestra diversos retratos de corte más clásico, pero también otros crudos o incluso “gamberros”, como dice el comisario de la muestra, Antonio García.Ralph Perou

Aunque nació el 5 de enero de 1969 como Brian Hugh Warner Wyer, más tarde decidió utilizar como nombre profesional Marylin Manson a partir de los de la actriz Marilyn Monroe y el asesino Charles Manson. Ciencias oscuras, calaveras, telas de araña o símbolos de los Illuminati invaden gran parte del cuerpo de Marilyn Manson desde hace años.Ralph Perou

A finales de los años 90, Marilyn Manson realizó una gira conjunta con Courtney Love, que entonces lideraba la banda Hole. La banda azul que muestra la imagen es de aquella época. En uno de los conciertos, Love se burló de Manson en el escenario y se pelaron. En otro, ella intentó golpearle, pero no lo consiguió y terminó cayéndose sobre el escenario. Más tarde, la cantante abandonó la serie de conciertos. “Ahora somos amigos y nos reímos de eso”, recuerda Manson.Ralph Perou

La imagen se tomó justo después del rodaje del videoclip de la canción I don´t like the drugs (Mechanical Animals, 1998). “Usé esa peluca para parecerme a Andy Warhol, no debía parecer mi pelo real, no lo pretendía”, dice Manson. Perou asegura que Kate Moss cuenta con una copia de esta fotografía que alguien le regaló. El músico soñaba con que la modelo la hubiera colocado encima de su cama.Ralph Perou

Esta imagen forma parte de una serie que fue tomada en la terraza de una vivienda en Hollywood Hills. Manson dice que es una especie de traje inspirado en Alicia en el país de las maravillas. También cuenta que para la sesión fotográfica lanzaron algunas bombas de humo y poco después aparecieron helicópteros de la policía sobre su cabeza. En ese momento, dice, escondieron el arma. “Era altamente ilegal: era real”.Ralph Perou

“Esto fue genial porque no sabíamos que íbamos a hacer y me tiré polvo en la cara y sobre mi camiseta”, rememora Manson, que creía que aquel día estaba innovando por llevar un traje blanco, pero, en realidad, ya habían hecho algunas fotos conjuntas con otro traje blanco dos décadas antes. La foto está tomada justo después de cuando se hizo el tatuaje que tiene protagonismo en la imagen. “Creo que aún estaba fresco”, destaca.Ralph Perou

Manson posa con una cola de caballo y un conejo atropellado. “Lo cual es muy extraño porque ninguno de estos animales murió en el proceso de hacer la fotografía”, recuerda el propio músico, que explica que durante las sesiones fotográficas podía hacer alguna mueca de manera intencionada. “Pero, a veces, sé lo que hacen mis manos”, subraya. Perou, eso sí, captura todo.Ralph Perou

Durante la charla que Perou y Manson mantienen en el libro 21 años en el infierno, el primero explica que la diferencia entre un buen fotógrafo y uno malo es que “el bueno te deja ser tú”, en referencia al músico. “El mal fotógrafo tiene una visión de ti, sin apreciar que eres un artista y que lo único que necesita es estar ahí y tomar la foto”. Manson asegura que delante de Perou se siente cómodo, que nunca le dice cómo posar. “A veces, eso sí, te digo cómo no posar”, le responde el fotógrafo.Ralph Perou

Perou ha seleccionado esta imagen para la muestra en Málaga, pero la presencia de elementos religiosos y monjas en el libro es constante. Manso recuerda que fue a una escuela cristiana, de la rama episcopaliana. “No tienen monjas, pero yo tenía un rosario”, explica Manson, para recordar posteriormente que su abuela “torturaba” obligándole a arrodillarse si era malo o maldecía.Ralph Perou