Vestida de diseño escandinavo, esta vivienda barcelonesa es un taller reconvertido en casa. Un espacio construido alrededor del aire y la luz, que destila sensatez, sostenibilidad y paz.
Escalera de pino conduce a los dormitorios. Las sillas suecas de abedul, que rodean la mesa vintage adquirida en Gotham Vintage Design Furniture, las diseñó Sven Markelius en los años sesenta. La chaise longue es obra de Bruno Mathsson. La lámpara de techo modelo Verona la firmó el danés Svend Middelboe y las láminas de pared, los artistas de Kind of Cyan.Esta casa era un taller. Aquí trabajaba un herrero, que también vivía en la parte trasera con su familia. Cuando los arquitectos Alessandro Sannino y Anna Mezquita (Aiastudio) recibieron el encargo de remodelar el espacio, el antiguo negocio de metalistería había desaparecido. Pero la vivienda que lo sustituyó tenía poca luz. Por eso, lo primero que hicieron fue buscarla.Eugeni PonsAl otro lado del patio, en el rincón de lectura, la butaca de cuero negro fue adquirida en Habitat. El caballito de madera también es sueco y vintage (de los años cincuenta), al igual que el puf de cuero rojo. La lámpara de mesa es el modelo UFO de Anders Pehrson para Ateljé Lyktan.Con la luz llegó la ventilación. Y la vegetación. Las consiguieron inventándole —e implantándole— al edificio un patio central acristalado. Hoy la casa gira y respira en torno a él: los jardines urbanos no permanecen ocultos hasta ser descubiertos, alguien los siembra un día.Eugeni PonsLa cama y las mesillas del dormitorio son un trabajo realizado en roble y a medida por la carpintería Klaus Speis. La alfombra es de BSB.La planta baja no tiene interrupciones, es abierta y acoge la cocina-comedor, el salón y un dormitorio. La vegetación se cuela, con la luz, desde el patio. Los arquitectos restauraron la escalera de pino original que llevaba a la vivienda del herrero y que ahora conduce al piso donde hay más dormitorios y un estudioEugeni PonsLa alfombra del rincón de lectura es también de BSB; el lienzo rojo, de Andrés Waksman, y la lámpara de lectura es el modelo Asea producido en Suecia en los años cincuenta.Con la nueva luz, la vegetación y el aire renovado, la casa es hoy un marco para la vida. Casi toda da un paso atrás: es neutra y blanca, pero la madera de roble del suelo de algunas estancias y el bambú —ambos materiales trabajados por el diestro carpintero alemán Klaus Speis— y un festival de diseño escandinavo vintage —con piezas adquiridas en la tienda Noak Room— arropan la convivencia.Eugeni PonsA un lado del patio queda el salón de la casa, al que se abre la cocina. Casi todo el mobiliario proviene de Noak Room, una tienda barcelonesa de diseño vintage escandinavo. Así, la butaca de teca, tapizada en azul Klein, es sueca, de los años sesenta, al igual que la mesa de centro y el sofá tapizado con terciopelo. El banco de pino, forrado con piel de oveja, es noruego; también el aplique con forma de rama y la lámpara con arco. Los jarrones son del artista australiano Cameron Fraser, la jardinera de madera de palisandro y latón es también sueca, y la lámina de la pared, una obra de los artistas Kind of Cyan. La alfombra es de la marca BSB.El pasado de este lugar ha sido transformado, pero no borrado. Más allá de la escalera, las molduras del techo hablan de él, el mobiliario delata una nueva oportunidad para la mejor artesanía, y el patio y la actividad en torno a él remiten a la sensatez, la sostenibilidad y una plácida vida cotidiana.Eugeni PonsEn la cocina, los armarios —lacados en blanco o acabados en bambú— y la mesa alta son de la carpintería Klaus Speis. La encimera es de mármol blanco; el grifo, de Galindo; el pequeño dibujo, de Elena Molinari, y los taburetes, de Noak Room.Eugeni PonsEn el baño, el lavamanos es de Roca; el grifo, de Max- Tres, y los azulejos verdes, de cerámicas Complementto.Eugeni Pons
