Tapiz ideado y diseñado por Inés Sistiaga, Joan Vellvé y Lucas Muñoz y fabricado a mano en ese mismo espacio por Sistiaga. Hoy cuelga en el restaurante MO de la capital y representa un árbol genealógico de los participantes del proyecto: dueños, galeristas, obreros, arquitectos, metalistas, Lucas e Inés… Delante, la máquina tricotosa de ella y la pistola de tatuar alfombras.
Los diseñadores Inés Sistiaga y Lucas Muñoz vinieron desde Eindhoven (Países Bajos) a Madrid para trabajar en el encargo que la galería Machado Muñoz hizo a Lucas: concepto, diseño y producción del restaurante MO de Movimiento y de todos sus elementos.
Asier RuaDe izquierda a derecha, parte trasera de un sistema de sonido hecho por Lucas con restos de otra instalación que usan para almacenar vinilos; columna de refrigeración hecha por Joan Vellvé y Muñoz en terracota, conectada a la ventana del techo como extractor de humos; cruz de madera de Parasite 2.0 a la que le han puesto ruedas y usan de librería; macetas pintadas por ellos; tinaja colgante que sirve de refrigerador de aire, y mesas de palés industriales sobre ruedas.
Tras pasar por varias casas de alquiler y prestadas, dieron con esta nave que cumplía con creces lo que buscaban: espacio de sobra y luz a raudales. “Nos enamoró su luz natural, sus cerchas y su frescor. A
pesar de no tener prácticamente ninguna ventana al exterior, la altura de siete metros genera sensación de amplitud”, explica Muñoz. El hecho de que antes hubiese un showroom facilitó el desembarco: “Ha sido esencial que estuviera en buenas condiciones de obra, ya que compartir casa con taller, a veces, supone un caos.Asier RuaRetrato de Inés Sistiaga y Lucas Muñoz.
Pero al ser un espacio tan limpio, no hay sensación de suciedad”. Con una reforma mínima —se acondicionó una ducha y ellos mismos montaron una cocina de Ikea—, la nave de 150 metros cuadrados, divididos en cocina, baño y taller en la planta de abajo y el dormitorio en la entreplanta, el hogar estaba preparado para acoger a la pareja, el arsenal de herramientas, maquinaria y mesas que los proyectos de ambos requieren, y, por supuesto, a sus dos gatos, Paco y Lola. Asier RuaEstantería de lanas y textiles de Inés. En la balda superior, miniprototipos de los botijos de ventilación y pantufla deportiva, proyecto de la artista.
El resto fue cuestión de tiempo y aprovechamiento. “Empezamos con una cama arriba y unas mesas abajo. Enseguida decidimos ponerle ruedas a todo para que la distribución fuese flexible. El constante flujo de prototipos para el restaurante MO y otros proyectos pasados, presentes y futuros fue rellenando el lugar”. En cuanto al mobiliario, responde a la sostenible tradición del objet trouvé (objeto encontrado, en francés): “Todos los muebles son encontrados, regalados o apañados”. Asier RuaEn la pared, dos de las máscaras que representan a los cuatro espíritus contemporáneos (ventilación, transporte, iluminación y comunicación) hechas por Lucas Muñoz e Inés Sistiaga en 2018. Mesita encontrada en el barrio, sofá hecho con los sacos de obra del restaurante MO anudados, cojines diseñados por Inés para el Thyssen y prototipo de tinaja de ventilación.Asier RuaSofá hecho con un viejo colchón de Ikea apretado con sargentas de taller y diseño textil de Sistiaga. A la derecha, silla prototipo de las de MO, hecha con Nanu Youttananukorn y Raphaël Coutin y teñida con tinta china negra.Asier RuaEstructura creación deNanu Youttananukorn y Raphaël Coutin con sobre de mesa de baldosín catalán incrustado por Inés y Lucas.Asier RuaBaldas hechas con pulpos elásticos y tejas por su colega de trabajo Joan Vellvé, lámpara led atada con cuerdas por Lucas y teja contenedor de cosas de baño. Cepillos de baño diseñados y tejidos por Inés con fibras naturales.Asier RuaHierros de restos de obra, almacenados en la entrada, que han terminado sirviendo como percheros.Asier RuaÓleo de la abuela de Lucas copiado en el Prado del original de Velázquez (“de cuando se podía ir allí a pintar”). Manta de Ezcaray. Cojines de Inés para el Thyssen. Mesillas art nouveau de coleccionista cambiadas a un galerista belga por un objeto de Lucas. Jarrón azul del diseñador gallego Joel Blanco, regalo de amigo. Lámparas de mesa improvisadas con focos de taller y unas escuadras balconeras atornilladas al muro cabecero.Asier Rua
