El Pequeño País se despide (por ahora) de sus miles de seguidores

Miles de niños han disfrutado durante cinco semanas del festival Pequeño País. A través de la web del diario los grupos Yo soy Ratón, Petit Pop, Chumi Chuma, La Fantástica Banda y el mago Jorge Blass han entretenido a las familias durante una hora todos los lunes. Sus vídeos acumulan más de 80.600 visualizaciones en el canal de Youtube del diario.

El confinamiento puso a prueba incluso a los padres más entregados. Los pequeños de la casa resistieron un mes sin salir a la calle y eso implicó agudizar la creatividad para entretenerlos. Con el objetivo de apoyar a las familias, EL PAÍS puso en marcha el ciclo de actuaciones Pequeño País. “Todos estamos igual, los padres trabajando mucho, ellos –por los niños- haciendo también tareas, pero aburridos, viendo la tele sobre todo y estos pequeños conciertos nos han venido genial”, valora Elena de Pedro, madre de una niña de 11 años que ha seguido todo el festival desde Andorra, donde residen.

El primer grupo en actuar fue Yo Soy Ratón. La banda, que aúna la canción protesta con el ámbito infantil, reunió a sus ocho integrantes de manera virtual para que el espectáculo fuera completo. Para la familia de Elena Losana, con 7 niños de entre 13 y 2 años y su marido confinado por covid-19, “fue una manera de desfogarse”. En Soy Ratón descubrieron un nuevo grupo que los sorprendió por su ritmo y letras. Con él instauraron el baile como una actividad previa a los aplausos de las ocho para los sanitarios, creando así un momento de diversión y de actividad física que ha sido especialmente beneficioso para su hija Eva, con diabetes. “Me gustó compartir ese momento con ellos, verlos que se soltaban bailando, cada uno con su estilo, porque estaban en casa y no había quien los juzgara”, cuenta.

El cartel del festival siguió creciendo con Petit Pop, un grupo muy popular entre los padres por sus tintes rockeros y que ha hecho que Losana descubra que una de sus hijas “apunta maneras” en este género. Con temas como Bicho Bola, Quiero un Poni o El invierno está al revés, los niños pudieron bailar y desgañitarse junto a los adultos. La banda cumple este año una década de vida y así lo celebraron con EL PAÍS.

Dentro de este ciclo también ha habido espacio para uno de los espectáculos del que más disfrutan los niños: la magia. Jorge Blass atravesó las pantallas de miles de casas con sus juegos de cartas, monedas y fotografías. Hizo a los niños partícipes de la magia sorprendiéndolos no solo con lo que él mostraba, sino con lo que los más pequeños también pudieron aportar a sus trucos. La hija de 4 años de Susana Herreras “flipó” con el mago. “Ahora está todo el tiempo haciendo trucos y dice que quiere ir a la tienda de magia a comprar cosas”. Confiesa que no le gustan los conciertos infantiles porque suelen ser un tanto ñoños, en cambio el cartel de Pequeño País la ha asombrado al alejarse de los estereotipos de la cultura para niños.

Las tres primeras propuestas se emitieron a las seis de la tarde, pero con el desconfinamiento para los menores de 14 años, que podían salir entre las doce de la mañana y las seis de la tarde, el diario adaptó su horario. El grupo Chumi Chuma inauguró la nueva cita, a las siete y cuarto de la tarde. Chuma, el monstruo de un solo ojo, y el resto de la banda hicieron sonar mucho rock and roll desde sus casas e incluso jugaron con los niños en directo y salvando la división impuesta por la pantalla.

Después de un mes acompañando a las familias y con un estado de confinamiento más relajado,  Pequeño País se despidió el pasado lunes con La Fantástica Banda. La poesía y la música inclusiva son las señas de identidad de este grupo, que ha logrado que los niños reciten versos de Lorca o Gloria Fuerte a voz en grito. También celebrado sus 10 años de carrera, los componentes hicieron un repaso de su historia, acompañados de Casi, una niña que ha perdido su ojo, la nariz y la oreja, y la araña Juanita. Todos los vídeos del festival siguen disponibles en el canal de Youtube del diario.