Triste Senado
El Senado es una cámara en entredicho, algunos la llaman “cementerio de elefantes” y a los políticos parece que les da igual, pues no intentan lavar su imagen. Es una cámara de representación territorial donde unos cuantos senadores son elegidos por cada comunidad autónoma para representarla. En Castilla y León eligen a Javier Maroto —que nunca ha vivido en esa comunidad— porque no fue elegido en las generales en Vitoria y hay que darle salida. Para ello, ahora se empadrona en Segovia. Creo que esta imposición es un insulto al Senado, a Castilla y León y una vergüenza para la democracia. Tengo la esperanza de que el resto de partidos lo evite, pero me temo que no sucederá. ¿Nadie sabe ya lo que es la ética y la responsabilidad?
Carlos Niño Pérez. Burgos
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